«Seré bastante franco: ha sido una discusión muy crítica», ha dicho el presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, al ser preguntado por si los ministros habían atacado a Varoufakis durante la reunión de Riga por la falta de progresos en las negociaciones.
«Esperábamos escuchar resultados positivos y un acuerdo sobre el que decidir, y todavía estamos muy lejos de eso. Así que sí, fue una discusión muy crítica y hubo una gran sensación de urgencia en la habitación», ha resaltado Dijsselbloem.
Varoufakis ha contestado a las críticas que «si hay una forma de hacer este proceso más eficaz y menos difícil, estamos abiertos a sugerencias», pero ha rechazado de plano que se vuelva a las antiguas misiones de la troika a Atenas.
«A lo que nos resistiremos, no por razones dogmáticas sino porque pensamos que no funciona, es la idea de regresar a un proceso que fracasó tan miserablemente en el pasado», ha dejado claro.
En ese sentido, ha confirmado que persisten «diferencias» entre Atenas y sus acreedores para lograr un acuerdo sobre las reformas que debe aplicar por su rescate, aunque se ha mostrado seguro de que dicho acuerdo se alcanzará rápidamente.
«Estamos de acuerdo en que el acuerdo será difícil, pero va a pasar y va a pasar rápido, porque es la única opción que tenemos», ha asegurado Varufakis.
Tras este intercambio de acusaciones, el Eurogrupo ha sido incapaz de acordar cómo podrían acelerarse las negociaciones y lo ha dejado en manos de la troika, según fuentes europeas. Tampoco se ha fijado un nuevo plazo para llegar a un acuerdo, aunque el ministro español, Luis de Guindos, ha mencionado la próxima reunión prevista para el 11 de mayo.
Las negociaciones entre Grecia y sus acreedores apenas han avanzado desde el acuerdo del 20 de febrero para prorrogar cuatro meses el rescate debido a la resistencia del Gobierno de Syriza a la presencia de la troika en Atenas para examinar el estado de las cuentas helenas y a las fuertes discrepancias sobre las reformas necesarias en aspectos como el mercado laboral, las pensiones o la subida del IVA.