Un tribunal de Jerusalén ha condenado por «asesinato» al israelí Yosef Jaim Ben David, de 30 años, por la muerte en 2014 de un menor palestino al que él y dos menores quemaron vivo en venganza por la muerte días antes de tres adolescentes israelíes en el distrito cisjordano de Hebrón.

Muhamad Abu Jadir, de Jerusalén este, fue secuestrado por el condenado y dos menores que le acompañaban, tras lo cual le trasladaron a un bosque de la parte oeste y le quemaron vivo. Los dos menores que le acompañaban ya fueron condenados.

El proceso judicial estaba interrumpido desde hace tres meses en espera de que los jueces decidiesen si Ben David era responsable de sus actos en el momento de los hechos, al alegar la defensa que sufrió un brote psicótico, informan los principales medios digitales locales. Dos informes psiquiátricos contradictorios sobre su estado retrasaron la decisión de los jueces.

«Sabíamos desde un principio que no estaba loco, que era un mentiroso. Nos duele, mucho. El juicio ha durado demasiado. Cada vez que lo vemos nos arde la sangre», ha señalado en los tribunales Husein Abu Jadir, padre de la víctima.

La pena impuesta a Ben David por asesinato será conocida en el plazo de un mes.