Lo ocurrido el pasado 14 de julio en Niza, cuando más de 80 personas fueron mortalemente atropelladas por un camión mientras aguardaban el inicio de los fuegos artificiales, ha llevado a la organización de las fiestas de Baiona a modificar su programa.

Empezando por la ceremonia de inicio del próximo miércoles 27, que habitualmente tenía lugar a las 22.00 y que se adelantará a las 19.00. El personaje del Rey León dará las fiestas por comenzadas, pero no tendrá lugar el tradicional lanzamiento de las llaves de la ciudad desde el balcón del Ayuntamiento, ni tampoco la traca pirotécnica.

También se han suprimido los actos infantiles del jueves y el acto de despedida del día 31 se limitará a los fuegos artificiales. Se mantienen sin embargo otros eventos como los bailes, los conciertos, las vaquillas y las corridas de toros.

Petardos prohibidos y tráfico cerrado

Queda estrictamente prohibido el uso de petardos o artilugios similares «para evitar posibles reacciones masivas de pánico», ha manifestado el edil encargado de la seguridad, Christian Millet-Barbé, que ha recomendado a quienes acudan a la fiesta que lo hagan sin mochilas, que no olviden los documentos de identidad y que lo hagan con suficiente antelación a actos como los toros ya que los controles van a ser estrictos.

Las entradas de los vehículos a la ciudad serán reducidas de siete a cuatro y estarán protegidas por barreras y pilones de cemento. Solo se permitirá el acceso al interior del perímetro festivo de 7.00 a 11.00 y no habrá excepciones, ni para los residentes, ni para los vehículos de proveedores u  otros transportes de material para los festejos. Todo vehículo que permanezca en el recinto de la fiesta después de las 11.00 será retirado por la grúa.