Martínez se ha mostrado además convencido de que no son «unos presupuestos sociales» y, aunque ha asegurado que afrontará la negociación «con voluntad de acuerdo», ha adelantado que asuntos como la actualización de la cuantía de la RGI ligada al IPC son «una traba» para apoyarlos.

El representante de Elkarrekin Podemos ha subrayado el «estancamiento», algo que «vuelve a demostrar» la necesidad de una reforma fiscal que «es necesario abordarla ya, de forma inmediata».

Ha criticado que también «se omiten cuestiones como la inversión en educación, la gran damnificada» del nuevo proyecto, o el incremento de partidas «nimias» del 1% en el capítulo referido a la retribución del personal de la Administración, «cuando el IPC ha subido el 1,5% y está previsto que suba un 2%».

Aunque ha asegurado que Elkarrekin Podemos presentará sus enmiendas y negociará el proyecto, ha remarcado a Azpiazu de que el modelo social de su coalición y el del PNV «es muy diferente. Para nosotros no son unos presupuestos sociales, para ello hace falta más ingresos y una reforma fiscal que cargue al que más gana».