En el hundimiento y sepultura del Banco Popular acordaron en una asamblea de «bajistas» y ejercieron el capitalismo de casino. Su venta por un euro al Santander y la amortización de acciones, al valor de cero. A esto se le llama «posiciones cortas» que consiguen la ganancia máxima posible... Se habla que hay dudas legales en la forma de la liquidación.

La venta a crédito o apuestas bajistas funciona de la siguiente forma: el inversor (normalmente un fondo) alquila a un accionista para venderlas, cuando piensa que la cotización va a bajar (de hecho, contribuye al ponerlo a la venta) las vuelve a comprar a precio más barato para devolverlas y obteniendo una plusvalía, y tendrá que deducir el precio del «alquiler» al prestamista. La maniobra es expuesta: 1) el valor no desciende como esperaba, y si lo hace, debe acertar en la recompra de las acciones para devolverlas, antes que el precio suba y crea pérdidas, que como las ganancias pueden ser cuantiosas.

Lo original del Popular es que los que mantuvieron sus posiciones hasta el final (la sesión del martes, previa a la intervención del banco en la madrugada del miércoles) no fue posible recomprar porque se amortizaron y por ello rebajado a cero. ¿Qué pasará en esas posiciones? Hay un revuelo, pero dicen que los «bajistas» han obtenido el máximo beneficio posible, la mayoría con ganancias por la diferencia entre el precio de venta de las acciones y el valor actual es cero.

¿Capitalismo de casino. Ganancia máxima. Especulación total. Economía sin alma?... ¿se sabrá?

Salud y República.