La Sala de lo Social del TSJPV ha aumentado en 112.000 euros la indemnización impuesta en un principio a la familia del trabajador fallecido en junio de 2012 por su larga exposición al amianto. La indemnización asciende ahora a 339.777 euros.
La empresa CAF recurrió en primera instancia el origen profesional de la enfermedad, y más tarde trató de reducir a la mitad la indemnización debido al hábito al tabaco del fallecido. El TSJPV reconoció la muerte como derivada de enfermedad profesional tras el diagnostico de metástasis pleurales de carcinoma.
Entre 1963 y 1973 el trabajador estuvo expuesto al amianto hasta que sufrió un accidente laboral y pasó a ocupar otro puesto.