Esta es precisamente la condición sine qua non para matricularse en las Aulas de la Experiencia y poder cursar así los estudios que darán derecho, tras cuatro años de carrera, al Título Universitario en Ciencias Humanas. No hay presión por aprobar, no hay que buscar un empleo al finalizar los estudios, sino todo lo contrario, porque para acceder a estas aulas deben haberse cumplido esos 55 años y estar jubilado. Es decir, que aquí se viene a estudiar por placer, por aprender, no por obligación.

¿Y quiénes son los alumnos? ¿A qué perfil responden? «Pues hay de todo, como en la sociedad en general», indica el profesor Josu Chueca, director de las Aulas de la Experiencia guipuzcoanas. «En este momento contamos con 182 alumnos, a los que hay que añadir los 123 que siguen los CUM (Cursos Universitarios para Mayores). El título en Ciencias Humanas se obtiene tras cursar cuatro años, y una vez obtenido se puede acceder a los CUM, de dos años de duración», explica Josu. El objetivo de los alumnos, y en esto la coincidencia es total entre aquellos a quienes hemos preguntado, es ampliar el bagaje cultural y mantenerse intelectualmente activos, sin resignarse a que jubilación laboral equivalga a jubilación personal.

La enseñanza superior para personas mayores, procedente de Europa, cuenta ya con 16 años de recorrido en Euskal Herria, pues fue en 1999 cuando Kutxa abrió la primera aula en la calle Garibai de Donostia, si bien al poco tiempo la iniciativa pasó a manos de la UPV-EHU, cuyos profesores son desde el año 2000 los encargados de impartir las clases. Desde docentes recién contratados por la UPV hasta catedráticos con nutrido curriculum, toda la escala de profesores imparte sus conocimientos en estas aulas para mayores.

Materias de carácter humanístico

Las materias que comprende el Título Universitario de Ciencias Humanas son de carácter predominantemente humanístico, y se dividen durante los primeros tres años en asignaturas obligatorias y optativas. En el cuarto y último, solo se imparten las optativas. En el primer curso, por ejemplo, las asignaturas obligatorias son Historia Universal, Lengua y Literatura, Sicología, Historia del Arte, Elementos y evolución histórica de la música, y Salud y actividad física. A medida que avanzan los estudios se añaden Cultura vasca, Historia del pensamiento económico y político, Ciencia y tecnología, Geografía y ecología, Nutrición y salud… siempre hablando de materias obligatorias.

En cuanto a las optativas, la oferta tampoco es manca: desde Informática hasta Gobiernos, parlamentos y partidos en Europa y América, pasando por Euskal literatur tailerra, Fotografía digital o Familia y matrimonio en el siglo XXI. Obtenido el título, el alumno puede cursar los CUM, compuestos de materias optativas de Ciencias Humanas y asignaturas pertenecientes a las carreras oficiales del campus de Gipuzkoa de la UPV-EHU. En cualquier caso, ha de quedar claro que la superación de estos estudios no faculta para el acceso a titulaciones oficiales. Tampoco se trata de formar profesionales que puedan competir en el mercado de trabajo con los jóvenes que cursan sus carreras; de ahí que se requiera a los aspirantes a las Aulas de la Experiencia cumplimentar una declaración jurada en la que se indica que «no desarrollo, ni tengo propósito de desarrollar, actividad remunerada alguna por cuenta propia o ajena».

Experiencia «absolutamente gratificante»

Ha terminado el «recreo» de las 11.00 y toca clase de Arte, con Leonardo de Vinci como figura a analizar en el Quattrocento y Cinquecento italianos. Medio centenar de alumnos y alumnas (repartidos prácticamente a partes iguales) siguen atentamente las explicaciones del joven profesor, armados de cuaderno y bolígrafo. Marian Larrea es una de ellas. Nos cuenta que ya antes de jubilarse tenía previsto matricularse en las Aulas de la Experiencia, pues no se le pasaba por la cabeza limitarse a pasear y tomar el café con las amigas una vez libre de las obligaciones laborales. La experiencia está siendo «absolutamente gratificante» y no duda en recomendársela a todo el mundo en su situación.

No faltan caras conocidas entre los alumnos. Es el caso de Miguel Buen, quien fuera alcalde de Errenteria por el PSOE, diputado en Madrid, portavoz en las Juntas Generales de Gipuzkoa, y ahora, retirado ya de la arena política, es un alumno más de las Aulas de la Experiencia. Y lo suyo le ha costado, pues la demanda es superior a la oferta de plazas y la UPV tiene que recurrir al sorteo para adjudicarlas. Buen se quedó fuera las dos primeras veces que intentó matricularse, pero a la tercera ha sido la vencida.

Esta limitación de plazas es el único obstáculo a superar por los mayores que deseen cursar los estudios de las Aulas de la Experiencia. Aquí no hay Selectividad ni se abonan matrículas prohibitivas. En el primer aspecto, la filosofía de las Aulas es la de abrirse a cualquier persona que cumpla el requisito de edad, independientemente de cuál sea su nivel de estudios previo. Los hay que han trabajado en la Administración y quienes lo han hecho en un taller. En cuanto al costo ecónomico –Kutxabank colabora con el proyecto–, el importe de la matrícula es de 438 euros cada uno de los tres primeros años, y de 330 el cuarto y último. Hay que tener en cuenta que además de las clases presenciales los cursos comprenden varias salidas culturales didácticas por Euskal Herria, ya abonadas en la matrícula.

Nafarroa, Araba, Bizkaia, Ipar Euskal Herria

La oferta de cursos universitarios para mayores no se limita a Gipuzkoa. En el caso de Nafarroa, la UPNA cuenta con el Diploma en Humanidades y Ciencias Sociales, destinado a mayores de 50 años y desarrollado a lo largo de cuatro cursos anuales, tanto en el campus de Iruñea como en el de Tutera.

En el caso de Araba, la UPV ofrece en la Escuela de Magisterio de Gasteiz el mismo programa que en Donostia, con iguales condiciones de acceso, mientras que en Bizkaia la oferta difiere un tanto. Los alumnos vizcainos, que igualmente han de superar los 55 años de edad, tras obtener el título de Ciencias Humanas –ya van doce promociones– pueden optar, desde el año pasado, a los denominados Cursos Complementarios de Actualización Formativa I y II, de periodicidad anual y dividido cada uno de ellos en dos cuatrimestres. Estas enseñanzas se imparten en horario de tarde en las Aulas de la Experiencia de la calle Banco de España, 2.

En el caso de Ipar Euskal Herria, la oferta de estudios para personas mayores corre a cargo de la UTL (Université du Temps Libre), con sedes en Angelu, Baiona y Biarritz. En la UTL los cursos son más variados y no tienen carácter reglado. La oferta comprende conferencias, cursos de idiomas, talleres de tiempo libre y actividades deportivas, que atraen a centenares de participantes, con una edad media que ronda los 60 años.