NAIZ
BILBO

Cáritas alerta de la «cronificación» de la pobreza

Cáritas ha  presentado su informe de actividad de 2015 en el que remarca la «creciente desigualdad social y la cronificación de la precariedad» en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa. Durante el año pasado atendió a 44.764 personas.

Comparecencia anterior de Cáritas en Bilbo. (Marisol RAMÍREZ / ARGAZKI PRESS)
Comparecencia anterior de Cáritas en Bilbo. (Marisol RAMÍREZ / ARGAZKI PRESS)

Cáritas ha constatado en su informe de actividad relativo al año 2015 la «creciente desigualdad social y la cronificación de la precariedad» en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa. El presidente de la ONG de la Iglesia Católica en la CAV, Carlos Bargos, ha manifestado en Bilbo que su organización «no percibe que la mejoría económica y del empleo esté llegando a las personas que han caído en la pobreza y la exclusión social».

En este punto ha subrayado que en los registros se observa una «tendencia al alza» de la tasa de paro de larga duración, y que el 60% de los contratos se realizó a personas de entre 25 y 44 años de edad, por lo que, según ha señalado, los mayores de 45 y menores de 25 quedaron en los márgenes de la contratación. Frente a ello, ha puesto en valor el sistema de protección social, en especial la Renta de Garantía de Ingresos (RGI), «por lo que supone de freno a la exclusión severa y alivio de los efectos de la desigualdad».

Así, en línea con anteriores informes, Cáritas ha indicado de nuevo que «el mayor riesgo de pobreza y exclusión social lo sufren las familias con menores», para quienes la ocupación laboral, junto a otros factores como el nivel de estudios o el de renta, son causantes de que tal situación se herede.

El número de intervenciones prestadas por Cáritas en la CAV, que contó en 2015 con cinco millones de euros, «continúa siendo muy alto» y se ha situado en 44.764 personas. En Araba, 5.971 personas se beneficiaron durante el año pasado de las distintas ayudas y servicios de atención de Cáritas. En Gipuzkoa por su parte fueron 27.429 personas, casi un 8% menos respecto a 2014, cuando fueron 29.834. También en Bizkaia la cifra ha descendido en 2015 y han sido 11.364 las personas atendidas, frente a las 11.556 de 2014.