Desde esta mañana los rumores sobre una posible dimisión de Sandro Rosell de la presidencia del club blaugrana han copado las primeras páginas de los diarios locales y deportivos. El motivo principal apunta al inicio de una investigación por supuestas irregularidades en el fichaje de Neymar.

Rosell ha mantenido esta mañana en su domicilio barcelonés un encuentro junto a sus vicepresidentes Javier Faus y Josep Maria Bartomeu, con el director general, Antoni Rossich, y con el nuevo jefe de comunicación, Albert Montagut.

Para las 18.00 había sido convocada una reunión de urgencia en las oficilas del Camp Nou para abordar el futuro de la junta directiva. Poco antes de las 21.00, Rosell ha anunciado ante los medios el final de su mandato y el hasta ahora vicepresidente deportivo Josep Maria Bartomeu ocupará su lugar hasta 2016, por lo que se descarta la opción de unas elecciones anticipadas.

Contrato de Neymar

La situación de estrés que vive el Barcelona en los último días viene dada por la posibilidad de que el presidente del Barcelona sea imputado por la Audiencia Nacional española, después de que un socio (Jordi Cases) presentase una demanda contra el presidente azulgrana por irregularidades en el contrato del jugador brasileño Neymar.

El lunes se publicaron unas cifras del contrato del jugador (95 millones de euros) que poco tenían que ver con las que ha ido ofreciendo el club desde la llegada de Neymar (57,1).

En una comparecencia pública el mismo lunes para presentar la remodelación del Camp Nou, Rosell insistió en la cifra que ha facilitado siempre el club (57,1) y emplazó al juez Pablo Ruz a que lo citase para declarar.

Al día siguiente, el martes, el magistrado admitió a trámite la querella del socio contra el presidente, y hoy el Barcelona ha presentado un escrito para que Pablo Ruz se inhiba de conocer el caso. Ante esa situación, Rosell ha decidido poner fin a su presidencia.