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Madrid

Religiosos y ultras, en la marcha contra la retirada de la ley del aborto de Gallardón

Decenas de miles de personas, aunque muy lejos del cerca de millón y medio que ha contabilizado la organización, se han manifestado hoy contra la retirada de la ley del aborto promovida por el exministro español, Alberto Ruiz Gallardón.

Manifestación de este mediodía en Madrid. (Dani POZO /AFP)
Manifestación de este mediodía en Madrid. (Dani POZO /AFP)

Madrid ha vuelto a acoger una movilización contra el aborto, en este caso el PP ha sido el centro de los dardos de los participantes, muchos de ellos votantes de la formación que advierten que, si Mariano Rajoy no da marcha atrás, le retirarán su confianza en las urnas. La sede de Génova, protegida por dos furgonetas de la Policía pero sin el habitual despliegue de las protestas contra los recortes del Ejecutivo, ha centrado muchas de las críticas, con silbidos y gritos de «donde están, no se ven, los barones del PP». Cierto es que 20 cargos públicos de la derecha se han sumado a la marcha. La más conocida, Ana Botella, alcaldesa de Madrid que no repetirá en la lista al Consistorio y que ha justificado su presencia por coherencia, ya que estuvo en las tres convocatorias desarrolladas por las mal llamadas «asociaciones provida» contra el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero (PSOE).

Junto a ellos, ultraderechistas como Democracia Nacional, reconocibles en medio de la calle Génova con su parafernalia fascista, así como religiosos aislados. En esta ocasión, la curia española no se ha sumado a la marcha, aunque sí que eran visibles sacerdotes y monjas, ya que existía un apoyo explícito por parte de la iglesia católica. De hecho, además de las banderas de España, también podían verse emblemas de «Viva Cristo Rey» y proclamas ultraconservadoras.

Bajo el lema «La vida importa», la marcha ha concluido en la plaza de Colón, donde el presidente de la agrupación conservadora Foro de la Familia, Benigno Blanco, ha clamado por la derogación de la ley vigente y ha advertido que, en caso de que el Gobierno de Rajoy no de marcha atrás e impulse una nueva normativa que restrinja los derechos de la mujer, volverán a salir de la calle. Será el próximo 14 de marzo, cuando convocarán una nueva protesta, ya con las municipales y autonómicas a tiro de piedra. «La sociedad sabrá recompensarles con el voto», ha argumentado, dejando claro que el grueso de la marcha son votantes o exvotantes del PP, ahora aliados con Vox, cuyas enseñas también eran visibles. «Tienes la gran responsabilidad política y moral en tus manos y deseamos que aciertes en tu decisión», ha clamado.