Como todos los años por estas fechas, se está celebrando en Donostia el Zinemaldia, ahora rebautizado en inglés, claro, «San Sebastian International Film Festival». Muchos dicen que el tiempo no está acompañando, porque llueve, pero al cine no se va cuando hace sol, sino cuando hace mal tiempo.

Así que toca pisar alfombra roja a todas horas. Unos porque son auténticos ñoñostiarras y les va la marcha; otros, porque les chifla el cine y se meten unas sobredosis de películas como para acabar exhausto y paralítico de estar tantas horas sentado en una butaca a oscuras, como si fueran gallinas ponedoras, confinadas en la misma jaula sin poder moverse desde que nacen; y otros, en fin, por razones laborales, porque para llegar al trabajo y volver a casa por el camino habitual tenemos que pasar por la alfombra de marras varias veces al día. Así que a estas alturas del evento que ya lleva celebrándose varios días, nos sale el glamour hasta por las orejas.

Otros años se oían a diario los gritos enloquecidos de fans desmayados ante la presencia de sus ídolos en figura de carne y hueso. Este año, de momento, no los he oído, pero es muy posible que hoy se escuchen clamores, aunque no de fans, sino de quienes acudirán a protestar porque se le va a entregar el Premio Donostia a Johnny Depp, actor yankee, que si bien es cierto que no ha sido condenado por ello, sí ha sido acusado de maltrato por su exmujer, por lo que la concesión del galardón ha levantado una polvareda de criticas en muy amplios sectores, que lo consideran, cuando menos, un error ético y de oportunidad.

Y es que una cosa es respetar la presunción de inocencia y otra bien distinta premiar a los imputados por delitos tan sensibles. Así lo han denunciado muchas asociaciones de mujeres. No parece muy acertado que se vea a estas personas, incursas en procesos por malos tratos, fotografiadas y aplaudidas como héroes. La dirección del Festival vetó las preguntas sobre el tema, y Manostijeras ha aprovechado la ocasión para presentarse como víctima y hacerse propaganda. Mal rollo.