Este mes se cumplen 50 años del asesinato de un poeta revolucionario, Roque Dalton, y de tres vascos también revolucionarios, el militante de ETA Jesus Mari Markiegi «Motriko», Iñaki Garai y Blanca Salegi. Al primero, lo mataron un 10 de mayo de 1975 en El Salvador. A los segundos, los tiroteo la Guardia Civil cuatro días después en Gernika. No quiero olvidar que hoy hace 16 años (17/5/2009) nos dejó Mario Benedetti, el poeta que nos legó un trato de vida y rebeldía. Por último, decir que el 15 de mayo de 1948 Israel inició el genocidio del pueblo palestino. Pienso en todo esto mientras miro el mar y un horizonte que no termina nunca y me pregunto a qué distancia, en línea recta, estaré de Gaza. E. Macron, presidente francés, en una entrevista a la TVF declaraba que solo «corresponde a los historiadores» decir si Israel está cometiendo un genocidio con el pueblo palestino. Una opinión muy cínica para eludir la responsabilidad que él y la UE tienen con el presente. Sin embargo, su compatriota, la escritora Kenizé Mourad (De parte de la princesa muerta, 1987) vetada en los medios europeos por su apoyo a Palestina, acaba de afirmar que «cualquiera que tenga un mínimo sentido de la justicia debería de ser propalestino». Gabon memoria, allí donde estés, sigue resistiendo al olvido de los hipócritas.