Koldo Landaluze
Especialista en cine y series de televisión

‘The Velvet Underground’, un caleidoscópico volcán creativo

Sentir, respirar y escuchar la música como si formáramos parte de la escena artística del Nueva York de los sesenta, cuando ‘The Velvet Underground’ se convirtió en un grupo de culto. Ese es el objetivo de Todd Haynes con su documental dedicado a la mítica formación neoyorquina.

Con un montaje vertiginoso, pantalla partida en dos o convertida en un puzzle de imágenes, Todd Haynes traza un retrato apasionante sobre una banda esencial en la historia de la música, que, como dice John Cale en la película, buscaron «cómo ser elegantes y cómo ser brutales al mismo tiempo».

El californiano Todd Haynes figura como uno de los cineastas más interesantes y originales del momento gracias a su facilidad para saltar de registro en registro.

En su filmografía figuran obras tan rotundas como ‘Lejos del cielo’ (2002) y ‘Carol’ (2015) y también ha abordado desde su muy peculiar mirada la trastienda musical de celebridades como Bob Dylan en su múltiple retrato coral titulado ‘I'm Not There’ en el que seis intérpretes –entre ellos Cate Blanchett, Richard Gere y un chaval afroamericano de ocho años– encarnaron y reinterpretaron diferentes momentos de la vida personal y profesional del cantante norteamericano que revolucionó la música popular en los años 60 y 70.

Otro acercamiento musical fue ‘Velvet Goldmine’ (1998) en el que, de manera muy indirecta, tomó como referencia la explosiva relación que compartieron David Bowie e Iggy Pop.

En relación a ‘The Velvet Undergroud’, Haynes señaló «en este documental queríamos representar la vida cultural de Nueva York de forma íntegra y compleja, porque la época era compleja».

En su exposición, también añadió que «es un filme que trata de la creación artística, de un grupo, The Velvet Underground, que es el arte del rock and roll o el rock and roll artístico».

Década prodigiosa

Lou Reed, John Cale, Sterling Morrison y Angus MacLise formaron el grupo en 1964 y al año siguiente MacLise fue sustituido por Maureen Tucker. Posteriormente se uniría Nico, aunque siempre se consideró su colaboración como temporal. Y en 1969 se fue Cale, a quien reemplazó Doug Yule.

En opinión de Haynes, «solo cinco álbumes, grabados entre 1967 y 1973, sirvieron para revolucionar el rock e influenciar el trabajo de muchos músicos posteriores y el surgimiento de nuevos estilos, como el glam rock de David Bowie».

El testimonio de Bowie aparece en el documental, como el de otros músicos y artistas como Jackson Browne, Jonathan Richman –que asegura haber asistido a 80 conciertos de The Velvet–, John Waters, La Monte Young, Delmore Schwartz o Jonas Mekas, la hermana de Reed –Merrill Reed-Weiner– e incluso Allen Ginsberg. Sin olvidar a cada uno de los miembros de la banda.

«Usamos sus voces de archivo, pero mantener su presencia es una de las bellezas del filme y era uno de los desafíos. Hemos construido la narración en torno a esos testimonios para describir un lugar y una época únicas», apuntó sobre ello el director.

Con un largo trabajo de selección desarrollado durante la pandemia, el equipo de Haynes exploró más de 600 horas de imágenes y más de 7.000 imágenes para elegir lo que querían contar. Una primera versión de más de 12 horas acabó en los 110 minutos que dura el documental, y del que no sobra ni falta nada.

Material, mucho inédito, procedente de los archivos de los productores Wyatt Stone y Bryan O'Keefe, de la Fundación Warhol –grabaciones de The Velvet Underground ensayando en The Factory–, o del archivo Lou Reed.