MIKEL INSAUSTI
CINE

«Passengers»

Si el mexicano Alfonso Cuarón no hubiera tenido la genial ocurrencia de reunir a una solitaria pareja hetero en el espacio, con el gancho añadido de Sandra Bullock y George Clooney, difícilmente el público actual estaría dispuesto a admitir un cruce entre la ciencia-ficción y el drama romántico. Por eso ha sido posible algo tan novedoso en “Passengers”, película que ya ha sido definida como la suma de la mencionada “Gravity” (2013) y “Titanic” (1997). Es más, la primera realización del noruego Morten Tyldum en Hollywood aspira a convertirse en la película romántica de la década, con toque futurista incluido. No en vano, Sony ha invertido 120 millones de dólares en este proyecto, que tendrá una distribución masiva mediante el estreno en unas fechas tan señaladas como las navideñas.

En el estudio confían en Jennifer Lawrence y Chris Pratt como pareja de moda, porque fueron los finalmente elegidos tras barajarse otros nombres que ya no tienen tanto gancho, como por ejemplo los de Keanu Reeves y Reese Witherspoon. Lo cierto es que “Passengers” incluso se podía haber adelantado en el tiempo a “Gravity”, porque el guion original de Jon Spaihts lleva años circulando por los despachos, pero han tenido que coincidir muchos factores para su definitiva puesta en marcha. Entre otros, el definitivo asentamiento del guionista dentro de la industria a partir de su trabajo para Ridley Scott en “Prometheus” (2012). Hoy es el día en el que la mayoría de superproducciones confían en su escritura; ahora mismo tiene en cartel “Dr. Strange” y se anuncian nuevas versiones de “Van Helsing” o “La Momia”, además de otra entrega de “Pacific Rim”, que han contado con su inventiva.

También se encuentra en plena trayectoria ascendente el realizador noruego Morten Tyldum, que se introdujo en el mercado anglosajón con la película ganadora de un Óscar “The Imitation Game” (2014), a la que llegó gracias al auge de la serie negra nórdica y su contribución al mismo con “Headhunters” (2011), adaptación de una novela de Jo Nesbo. En estos momentos prepara “Patter Recognition”, que se basa en la famosa novela homónima de William Gibson sobre el reconocimiento de patrones.

No hay más que ver el tráiler de “Passengers” para saber que será un gran éxito, gracias a la química que desprende la pareja principal y a un diseño de producción impresionante, que como toda ópera espacial que se precie sigue nutriéndose de la influencia visual de Kubrick y “2001”. Los interiores de la enorme nave Avalon parecen los de un crucero u hotel de lujo, con detalles como los del robot-camarero personificado por Michael Sheen, que generan verdadera expectación. Este transportador espacial traslada a cinco mil habitantes de la Tierra al lejano planeta-colonia Homestead II, en un viaje previsto de 120 años de duración.

Por un fallo en el sistema que controla las cámaras de sueño, el personaje de Chris Pratt se despierta cuando todavía faltan 90 años para llegar al destino en un nuevo siglo y en una nueva galaxia. Por temor a envejecer y morir solo, libera a la pasajera interpretada por Jennifer Lawrence y, además de enamorarse, al ser como los últimos seres vivos de la Tierra evacuada, deberán averiguar lo sucedido para encontrar una solución a la misión en peligro. Efectos especiales aparte, la mayor responsabilidad apunta hacia el director de fotografía mexicano Rodrigo Prieto, que se dio a conocer internacionalmente de la mano de Alejandro González Iñárritu con “Amores perros” (2000), para después ganarse la confianza de todo un Martin Scorsese, que ha vuelto a contar con él para su nueva película “Silencio”, rodada en Japón. Y la banda sonora es obra de Thomas Newman, que dispone de una inmejorable oportunidad para recuperar el prestigio de su mejor etapa, aspirando de nuevo a un Óscar que se le resiste.