Por las conversaciones que he podido tener con aficionados y aficionadas al cine fantástico, me he dado cuenta de que nadie tiene una idea clara del actual plan de Ridley Scott para la explotación de aquellos de sus títulos del género que le dieron fama al comienzo de su carrera. No creo que semejante ceremonia de la confusión le favorezca a la hora de renovar el interés por esas próximas películas basadas en otras suyas de sobra conocidas. Lo que queda meridianamente claro es que no dirigirá la continuación de “Blade Runner”, de la que bajo el título de “Blade Runner 2049” se ha hecho cargo el quebequés Denis Villeneuve. Por lo tanto, se reserva el control directo sobre el universo Alien, que ya se le ha complicado bastante. Para no liar más la cosa baste decir que “Alien: Covenant” es la secuela de “Prometheus” (2012) y la precuela de “Alien” (1979).

Se supone que la idea es ir conectando la franquicia “Prometheus” con la de “Alien”, para así llegar al origen de esas criaturas extraterrestres biomecánicas, con lo que el as guardado en la manga será la revelación definitiva de su procedencia. No queda claro cuántas entregas tienen que pasar hasta que así suceda, y en eso mucho tendrá que ver el funcionamiento en taquilla de todo este conglomerado. Para llegar a entenderlo, hay que pensar en que Ridley Scott se está haciendo un traje a medida, y que los guionistas a su servicio son los diseñadores que lo van ajustando a su cuerpo según las necesidades de cada momento. Ahora mismo sobre quien ha recaído la máxima responsabilidad de la escritura es en John Logan, que se las ha tenido que ver con un argumento previo de Jack Paglen y Michael Green.

El argumento en cuestión, del que se ha revelado el mínimo de información para seguir jugando con el misterio, inicialmente llevaba por título “Alien: Paradis Lost”, tomado de un poema de John Milton que hace referencia a la pérdida del paraíso y la caída del ser humano. Esto aplicado a la ciencia-ficción tiene que ver con el hallazgo de un planeta paradisiaco en una lejana galaxia que, con la llegada al mismo de la nave Covenant y como fruto de su exploración por los y las miembros de la tripulación, resultará ocultar un mundo oscuro y lleno de peligros. Los recién llegados son Billy Crudup, Katherine Waterston, Danny McBride, Demián Bichir, James Franco, Carmen Ejogo y Callie Hernández, entre otros.

Allí se encuentran con el androide superviviente de “Prometheus” (2012), encarnado por Michael Fassbender, quien se ha convertido en el rey de ese falso paraíso. También habrá apariciones de otros personajes de aquella película, ya que Noomi Rapace y Guy Pearce forman también parte del reparto estelar. Por las imágenes que se han filtrado del rodaje en Nueva Zelanda, el impresionante paisaje ha sido tomado en Milford Sound, dentro del parque natural de Fiordland. Menos fotos se han podido ver de los xenomorfos, rebautizados como neomorfos. Para dar sentido a tanto secretismo habrá que esperar al estreno, que se ha ido adelantando sobre la fecha prevista, para acabar anunciándose para esta primavera, exactamente para el día 19 de mayo.

Ni qué decir tiene que Ridley Scott sigue controlando la producción, si bien Walter Hill conserva sus derechos iniciales. No sé si la permanencia de los dos veteranos cineastas al frente del proyecto es una garantía de autenticidad, pero por el contenido del tráiler cabe afirmar que “Alien: Covenant” es fiel al concepto primigenio adscrito al fantástico terrorífico. No está de más recordar que “Alien” (1979) se inspiró en “Terror en el espacio” (1965), realizada por el genio del cine italiano Mario Bava. Por lo que, en tal sentido, no debería defraudar a quienes esperan un regreso al universo Alien en su vertiente más amenazante y aterradora.