BERTA GARCIA
CONSUMO

Entrega de viviendas

Suele ser habitual en las viviendas de obra nueva que se retrasen en los plazos previstos para su entrega al comprador. Hay personas que no desesperan porque quizás su situación no reviste nuevos gastos, algo que no les suele ocurrir a aquellos que deben hacer frente a un alquiler por los retrasos en las obras. De cualquier forma, hay que saber que la fecha de la entrega de un inmueble deberá constar en el contrato y si el comprador quiere aceptar una nueva fecha o desistir ante la demora podrá hacerlo porque la ley le ampara.

En el caso de que el comprador acepte un nuevo plazo o prórroga deberá figurar en una cláusula adicional del contrato otorgado, especificando el nuevo período de tiempo con la fecha de terminación de la construcción y entrega de la vivienda. Si por el contrario opta por el desistimiento podrá solicitar el reembolso de lo que ha entregado a cuenta más los intereses legales, bien porque la construcción no se ha iniciado, porque no termine en los plazos convenidos que se determinen en el contrato, o no se obtenga la cédula de habitabilidad –documento administrativo que ratifica que una vivienda reúne las condiciones básicas para ser habitada–. También tiene derecho a que le resarzan de los daños ocasionados: tanto los patrimoniales –por ejemplo, si ha tenido que alquilar otra vivienda o pagar por permanecer en la suya más tiempo, hacer dos mudanzas– como los morales –estrés, angustia, trastornos...– se pueden reclamar. Ahora bien, es más fácil demostrar y cuantificar los primeros que los segundos y para reclamarlos posiblemente tenga que ir a juicio.

En el supuesto de que si bien se ha entregado la cédula de habitabilidad pero se observan desviaciones con respecto al proyecto autorizado por la licencia de obra, el comprador asimismo podrá iniciar acciones legales.

Puesto que el objeto de la licencia de primera ocupación es comprobar el cumplimiento de las condiciones impuestas en la licencia de obras, se debe fiscalizar «si el edificio puede habilitarse para el uso pretendido por estar en zona apropiada y reunir las condiciones idóneas de seguridad y salubridad».