80 aniversario de la grabación del «eusko gudariak»
El legado oculto de Eresoinka
El «Eusko Gudariak» ha cumplido ya ochenta años desde que fuera grabado por primera vez por un coro de cámara de ocho voces y el grupo de txistulares de Eresoinka. Si bien sus orígenes son anteriores a la sublevación fascista que provocó la guerra del 36, la canción que ha quedado para la posteridad como el himno de los gudaris vascos se grabó en la ciudad de París el 21 de diciembre de 1938. El pueblo la hizo suya durante la posguerra hasta adquirir la categoría de himno por antonomasia del abertzalismo.

iritzia
Navidades invertidas

Reportajes
«Ser los más salvajes tiene su belleza, y yo ahí me siento muy cómodo, porque es coherente con lo que pienso, digo y hago»

Reportajes
Mantala jantzi, ondarea gal ez dadin

Miradas
La mercantilización de la menopausia

Miradas