TERESA MOLERES
SORBURUA

Prunos en primavera

La naturaleza excesiva en primavera viste calles y jardines con prunos en flor. Colores rosas y blancos tapizan el suelo a su alrededor con las flores caídas. El género prunos tiene doscientas variedades: ornamentales o frutales, perennes o caducas y distintas procedencias, en su mayoría de China y Japón. Todas se caracterizan por su espectacular floración primaveral; se pueden plantar en pies aislados o en grupos y se identifican por su fruto que consta de una nuez dura con la semilla dentro.

Prunus serrulata. Son árboles que pueden llegar a tener veinte metros de altura y es uno de los más decorativos por sus flores en primavera. En Japón es su árbol nacional y abundan en paseos y avenidas. Es espectacular su floración, como sucede en la plantación de cuatro km en Washington, a la orilla del río Potomac, que atrae a numeroso público cuando llega el buen tiempo.

P. amygdalus, almendro. Es un árbol caduco de cinco a ocho metros. Requiere de la poda para suprimir las ramas y brotes secos, además de los chupones, buscando que el centro quede aireado.

El albaricoque, P. armeniaca. Es rústico y de fácil cultivo. De cinco a ocho metros de altura, es poco exigente al igual que el almendro. Sus flores con pétalos blancos y cálices rojizos aparecen antes que las hojas, en marzo.

P. avium o cerezo. Este árbol alcanza hasta quince metros de altura con una extensa copa. Se adapta a todos los terrenos, lo único que le perjudica es la excesiva humedad del suelo. La poda tiene que ser ligera, de limpieza, procurando que el follaje quede lo más abierto posible.

El ciruelo o P. domestica crece de cinco a seis metros. Fácil de cultivar, se adapta a todos los suelos pero con preferencia a los de poca profundidad, calcáreos y frescos. Lo mismo que con otros frutales de hueso, es conveniente intercalar variedades a fin de asegurar la buena polinización de las flores.

Melocotón, P. pérsica. Admite el cultivo en espaldera. En la poda se eliminan las ramas jóvenes que tengan yemas en punta porque solo dan ramas y no flores. Le gustan los suelos profundos, ya que mejoran la calidad del fruto.

El prunus P. spinosa o endrino es un árbol pequeño o matorral de flores blancas, pequeñas, que cubren la planta durante marzo y abril. Se usa para delimitar campos e impedir el acceso de animales por sus hojas espinosas.