OSASUNA 0

ELCHE 0

Osasuna tiene el punto de mira muy desviado y sigue sin conseguir materializar su dominio en goles. Ante el Elche, los rojillos volvieron a llevar la batuta, achucharon sobre todo tras el descanso, pero en los metros finales se les apagan las luces. Como consecuencia, la escuadra navarra sumó su séptimo empate en los últimos nueve encuentros caseros, un rendimiento que sirve para seguir rozando las plazas del play-off.

Sorprendió Enrique Martín con más cambios en el once de los previstos. Al esperado Mikel Merino se sumaron los de Pucko –primero lateral y luego carrilero–, así como el de Olavide, ejerciendo labores de creación junto a Roberto Torres. De inicio, el técnico rojillo partió con una línea de cinco atrás, pero a la media hora varió sus planes y la redujo a cuatro, con el esloveno y Berenguer como alas.

Todo ello para llevar el control de la pelota ante un Elche que en buscar la espalda rival y las jugadas a balón parado fue donde llevó más peligro. Sin embargo, el peso del partido lo protagonizaron los anfitriones que, sin generar ocasiones excesivamente claras, sí que pusieron cerco a la meta contraria.

El buen hacer de Javi Jiménez impidió que el electrónico se estrenase del lado local, con acertadas intervenciones a sendos tiros de Berenguer –el más inci- sivo al borde del descanso– y otro más de Roberto Torres. Por contra, el 1-0 estuvo más cerca que nunca en una jugada de rebote que casi acaba en autogol, cuando Noblejas intentó despejar dentro de su área y el balón rebotó en José Ángel saliendo justo por encima del larguero.

Ese acierto que no llega

Osasuna intensificó su dominio en la segunda parte, embotellando a un Elche que apenas salió, aunque cuando lo hizo llevó cierto temor a la grada. Un sometimiento que no tuvo, una vez más, el premio del gol, con numerosos movimientos tácticos –con la entrada de Otegi se volvió al 3-5-2, como le gusta denominarlo a Martín– y un asedio que no fructificó en los ansiados tres puntos.

Un cabezazo al larguero de Oier, los fallidos remates de Urko Vera y un flojo disparo de Nino –salió para la última media hora– no alcanzaron para superar a un Javi Jiménez que estuvo muy seguro. El público se quedó con la miel en los labios y la escuadra navarra sigue en la muga del play-off –séptima–, empatada a 49 puntos con Zaragoza, Alcorcón y, lógicamente, Elche. Toca seguir peleando.

«Vamos a demarrar en el último repecho»

Enrique Martín, que tuvo el bonito detalle de acordarse de Yeray Lana en su comparecencia pública y lamentó «no haberle podido dedicar el triunfo», tiró de dialéctica ciclista para asegurar que el equipo «va a llegar bien al último repecho, en los últimos siete partidos tenemos que dar el demarraje».

«Hemos hecho lo indecible por ganar, llegando por ambas bandas y teniendo ocasiones claras, pero nos falta la finalización y el acierto. Soy optimista, llegarán las victorias en el momento oportuno», amplió. N.M.