Los candidatos Keiko Fujimori y Pedro Pablo Kuczynski se disputan hoy la presidencia de Perú en unos ajustados comicios, en los que los peruanos están divididos entre dos opciones de derecha y sobre la vuelta del fujimorismo al poder.

Kuczynski, de 77 años y exministro de Economía en el gobierno de Alejandro Toledo, ha conseguido en los últimos días remontar la ventaja que daban las encuestas a Keiko Fujimori, de 41 años.

Ambos candidatos son considerados «amigables» por los mercados por su carácter neoliberal, y mantienen un empate técnico, según los últimos simulacros de voto.

En su segundo intento por lograr la presidencia, Keiko Fujimori, hija del encarcelado expresidente Alberto Fujimori, debe hacer frente al reforzado antifujimorismo que ya le costó el triunfo en 2011 frente al actual presidente Ollanta Humala. «Cerrémosle el paso al retorno de la dictadura, la corrupción y la mentira», dijo Kuczynski, de Peruanos Por el Kambio (PPK).

Fujimori, candidata de Fuerza Popular, que ganó las legislativas en abril con el 39,85 % de los votos, rechazó «las declaraciones de mi rival, ya que no solo ofenden a mi equipo político sino a la gente que nos respalda. Todo esto es parte de la guerra sucia. La democracia no está en riesgo, la democracia está sólida».

En los últimos días la candidatura de Fujimori se ha complicado por denuncias de corrupción en su entorno, que se suman los delitos ocurridos en el gobierno de su padre. La petición de excandidatos del izquierdista Frente Amplio, segunda fuerza en el Parlamento, de un «voto crítico» a favor del PPK pueden romper el equilibrio y cerrar el paso al fujimorismo.