Ion SALGADO
GASTEIZ

Denuncian falta de seguridad y presencia de ratas en la planta de envases de Jundiz

Ernesto Villate, delegado de prevención de la planta de envases de Jundiz, propiedad de la Diputación de Araba y gestionada por la UTE FFC-Yárritu, denunció ayer ante la Comisión de Medio Ambiente y Urbanismo de las Juntas Generales de Araba las pésimas condiciones de los trabajadores, encargados de separar los plásticos depositados en los contenedores de reciclaje.

Según explicó, en la planta de Jundiz abundan las ratas, y los trabajadores deben retirar a mano animales muertos y residuos peligrosos con sus manos. Además, llevan años sin firmar un convenio por la «cerrazón» de la concesionaria, que se niega a mejorar los contratos de los empleados pese a tener beneficios. Y alertó de que no se separan todos los residuos.

La denuncia de Villate fue ratificada por Kamel Benkaddour, un trabajador que el pasado mes de mayo ingirió lejía tras discutir con sus jefes. «Empezaron a acosarme, me cambiaron de puesto y me llevaron a una zona donde no había cámaras. luego me pusieron a coger pañales, que no se suelen recoger a mano. Fue una humillación», destacó.

Benkaddour recordó que su situación empeoró en abril, cuando aprovechó una visita de los responsables de la Diputación foral de Araba para denunciar los «abusos» a los que son sometidos los trabajadores. Sus superiores le sancionaron y comenzaron a fotografiarle mientras trabajaba. Al final, le dijo al delegado sindical que no aguantaba más. «Ven las condiciones... parecía que estábamos en Bangladés», añadió.

Iniciativa de EH Bildu

El portavoz de EH Bildu, Kike Fernández de Pinedo, quien solicitó la comparecencia, criticó que se puedan estar vulnerando los derechos de los trabajadores en una infraestructura que es propiedad de la Diputación. «Ha habido quejas por las condiciones laborales y sanitarias, y parece que todo va a peor», señaló.

Cabe recordar que el pasado mes de junio, la coalición soberanista reclamó a la Diputación que vele por las condiciones de la plantilla, y censuró que la planta solo se limpia cuando va a ser objeto de una inspección.

El propio Fernández de Pinedo interpeló al diputado de Medio Ambiente y Urbanismo, Josean Galera, sobre lo ocurrido en la planta de Jundiz, pero este insistió en que el funcionamiento de la planta era correcto. «Vino a decir que las quejas de los trabajadores eran falsas», censuró el juntero.