La comisión de investigación sobre el ataque aéreo que el sábado pasado mató a 140 personas en la capital de Yemen señaló como responsable a la coalición liderada por Arabia Saudí.

Al menos dos bombas impactaron el pasado fin de semana en un salón de ceremonias donde se habían congregado cientos de personas con motivo del funeral del padre del ministro huthi de Interior, Jalal al Ruwaishan. Los investigadores, designados por la coalición liderada por Arabia Saudí, alegan que el bombardeo se produjo debido a una información «errónea» facilitada por la jefatura del Estado Mayor yemení, quien, según sostiene Riad, insistió en que ese lugar era «un objetivo militar legítimo» que debía ser atacado «inmediatamente».

«Debido al incumplimiento de las reglas de enfrentamiento y de los procedimientos de la coalición así como a una información errónea, un avión de la coalición atacó erróneamente este lugar, lo que provocó muerte y heridas a civiles», reconocen. Recomiendan sancionar a personas responsables de este acto, indemnizar a las víctimas del bombardeo, que dejó 525 heridos, y revisar las «reglas de enfrentamiento».

El equipo investigador asegura que la comandancia de la coalición le proporcionó «toda la información y documentos requeridos» para esclarecer los hechos y denuncia que «otras partes» aprovecharon lo ocurrido para «elevar la cifra de víctimas». Asimismo, recomienda «tomar las medidas legales para compensar de manera adecuada a los familiares de las víctimas y a los afectados»; y a las fuerzas de la coalición, que «revisen la aplicación de las normas de combate aprobadas».

Un total de 112 heridos fueron trasladados ayer a la capital omaní, Mascate, para recibir tratamiento. Omán es el único país del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) que no forma parte de la alianza y ha actuado de mediador, facilitando el transporte de las delegaciones insurgentes a las negociaciones.