La Real cree posible que puedan disputarse en Anoeta los partidos de casa una vez que arranquen las obras de remodelación del estadio, que se prevé que será alrededor del próximo mayo, aunque si fuera necesario desplazar a los aficionados el club tratará de que sea a San Mamés.

El presidente, Jokin Aperribay, fue quien comentó ayer la posibilidad de que puedan compatibilizarse las obras con los partidos de casa, pero también adelantó que, en caso contrario, solicitarán al Athletic que les deje el campo. No obstante, insistió en que están «intentando que la programación» de la remodelación permita que todos los partidos se jueguen en Anoeta.

Respecto al inicio de los trabajos, el máximo responsable del club señaló que quizás le corresponda a Anoeta Kiroldegia informar exactamente del calendario, aunque apuntó que será sobre el final de la primavera o el verano.

El presidente realista confirmó asimismo que el presupuesto de las obras de remodelación del estadio y del miniestadio adyacente está cubierto al 100% dado que la Real aportará entre 30 y 36 millones de euros, el Gobierno de Lakua 10 y la Diputación de Gipuzkoa 4. «Entre todos se va a realizar un gran esfuerzo y vamos a poder remodelar» Anoeta y hacer que la Real «tenga un campo como se merece», recalcó.

Alcalde y diputado

Por su parte, el alcalde de Donostia, Eneko Goia, que también participaba en el acto de apoyo al Banco de Alimentos, indicó que «todas las piezas» del proyecto están «encajadas» y que ahora se trabaja «sin descanso» para que las obras empiecen a materializarse hacia el mes de mayo del próximo año.

Por su parte, el diputado general, Markel Olano, manifestó que «es el momento en el que Gipuzkoa tiene que dar un salto cualitativo. La remodelación de Anoeta es una infraestructura muy importante para el territorio. Desde el punto de vista psicológico es muy importante para que Gipuzkoa dé un paso adelante, un salto de ambición», dijo.

Abelardo, a vueltas con la criticada defensa

Abelardo Fernández apura los entrenamientos antes del compromiso del domingo poniendo especial interés en cerrar una línea defensiva que ha encajado 22 goles, una media de dos por partido, y que centra las críticas de los aficionados.

Sabe que la nota que le pongan al Sporting estará en buena medida marcada por su capacidad de frenar el ataque de la Real, tarea para la que sigue sin poder contar con el central francés Jean Sylvain Babin y para la que no termina de quedar satisfecho con el rendimiento de Fernando Amorebieta.

Otra baja segura para el técnico asturiano es el camerunés Daniel Ndi, que sufrió una rotura de fibras en el entrenamiento del martes. GARA