El viernes por la noche, el activista medioambiental, dirigente de la Asociación Campesina Losada-Guayabero así como de Marcha Patriótica, Erley Monroy fue hallado gravemente herido San Vicente del Caguán y falleció tras ser trasladado al hospital. &dcTwo;Monroy había denunciado la presencia de grupos paramilitares en la localidad.

Esa misma noche, en La Macarena, en la misma región, un encapuchado entró en la vivienda de Didier Losada, presidenta de la Junta de Acción Comunal de la vereda El Platanillo, matándolo en presencia de su familia.

El domingo, en Policarpa, en el departamento de Nariño, mataron a Rodrigo Cabrera, defensor de derechos humanos y miembro de Marcha Patriótica.

Asimismo, el líder campesino y miembro de la Fundación por la Defensa de los Derechos Humanos y el DIH del Oriente y Centro de Colombia (DHOC) Hugo Cuéllar fue tiroteado el sábado a las 23.00, hora colombiana, cuando regresaba a casa tras asistir al entierro de su compañero Monroy en San Vicente del Caguán, donde han aparecido panfletos amenazantes firmados por las Autodefensas Unidas de Colombia, en los que se puede leer el siguiente mensaje: «Llegamos al Caquetá y estamos para quedarnos. Milicianos y testaferros de las FARC, venimos a hacer limpieza de San Vicente, Puerto Lozada y Meta».

En el departamento de Nariño atentaron contra el militante de Marcha Patriótica y subsecretario de la Asociación de Trabajadores Campesinos de Nariño Danilo Bolaños, quien resultó ileso junto a su novia.

Ante estos hechos, el Secretariado de las FARC-EP envió una carta pública al presidente colombiano, Juan Manuel Santos, exigiéndole que ponga fin a «este exterminio de inocentes cuyo pecado es su pensamiento crítico y su visión de nuevo país».

«Por un momento, haga un ejercicio mental y póngase en el lugar de las organizaciones sociales victimizadas o en el nuestro y pregúntese ¿qué actitud asumiría frente a este río de sangre que amenaza con arrasar el proceso de paz? ¿Y qué haría usted ante la reciente violación del cese al fuego que produjo la muerte de dos guerrilleros?», subraya la guerrilla en la nota.

A través de Twitter, el delegado plenipotenciario Pablo Catatumbo condenó «el asesinato sistemático de líderes campesinos. Exigimos aplicación inmediata Acuerdo Garantías de Seguridad. Vuelve la guerra sucia».

El comandante en jefe de las FARC, Timochenko, viajó ayer desde La Habana a Bogotá para, previsiblemente, firmar el nuevo acuerdo y que este pueda ser refrendado por el Congreso.