Imanol CARRILLO
Pelota

Bonito de ver, duro de jugar

Zabaleta puso en aprietos a sus rivales en la segunda parte, pero Elezkano erró en el momento crucial.

OLAIZOLA II-UNTORIA 22

ELEZKANO II-ZABALETA 19


Partido extraño el que se jugó ayer en Zierbena. Los cuatro pelotaris se estrenaban en el recinto vizcaino, y además lo hacían inaugurando el festival de pelota organizado para el día festivo en un horario adelantado con respecto al habitual debido al encuentro de la Europa League del Athletic en Viena. Los leones ya estaban clasificados de antemano –se jugaban el liderato de grupo–, pero los cuatro pelotaris, en plena primera fase del Campeonato de Parejas, tenían bastantes más cosas en juego.

El veterano Aimar Olaizola y su escudero Álvaro Untoria buscaban el segundo punto del torneo y, de paso, tomarse la revancha del 27 de agosto, día en el que perdieron en la final de la Aste Nagusia de Bilbo ante los rivales de ayer. Los azules, en cambio, saltaron a la cancha con la intención de poner en aprietos a los líderes y de estrenar su casillero tras la derrota ante Irribarria-Rezusta en la 1ª jornada.

Lo tuvieron a tiro en una segunda parte de partido en la que José Javier Zabaleta comenzó a gozar más con su golpeo y a poner en serios aprietos a Untoria en la zaga. Tanto, que si bien fueron por detrás en el luminoso durante prácticamente todo el encuentro –con distancias máximas de cinco tantos, 5-0, 9-4 y 15-10–, fue el propio Zabaleta quien logró el primer empate (18-18). Eso sí, con fortuna.

Un atrevido Danel Elezkano, con un remate entre los dos colorados tras un grandísimo gancho al ancho al que respondió de manera increíble Olaizola II, puso a los azules por delante por primera vez. Pero los rayos de luz se esfumaron de golpe. En el momento menos oportuno, el delantero vizcaino erró con todo a su favor al enviar la pelota a la contracancha con su zurda. Volvió a fallar en otras dos ocasiones para poner el 21-19, un marcador que ya fue inalcanzable para la pareja azul.

«Nos han tocado los partidos más duros en las dos primeras jornadas. A partir de ahora intentaremos ganar y estar arriba», resumió Zabaleta al término de un choque que comenzó con un tanto largo, como si de un calentamiento se tratara para la dureza que se avecinaba, y con un Aimar dominador.

El delantero de Goizueta no quería sorpresas y cinco tantos suyos pusieron la primera brecha en el luminoso (5-0). Elezkano II se la devolvió en esa lucha delantera, y con cuatro tantos de todos los colores puso el 5-4.

La ansiedad pasa factura

El de Zaratamo se creció cerca de casa, pero eso solo no basta ante un Aimar con suficiente experiencia como para saber aparecer en el momento adecuado. Como en los siguientes cuatro tantos, en los que de sus manos salió la calidad para seguir con la renta de cinco (9-4).

Untoria falló en ese momento, Zabaleta hizo lo mismo (10-5) y Aimar también erró. Elezkano lo aprovechó para hacer dos tantos y ponerse de nuevo a uno (10-9). Pero las ansias de querer empatar le pasaron factura, cometió una pasa en el camino y con el 16-15 tampoco acertó en el intento de empatar el duelo.

Fue su zaguero –sin llevar la revolución a buen puerto– quien endureció el partido, quitó pelota fácil a Aimar y puso en apuros a Untoria, que resumió a la perfección el choque: «Ha sido un partido muy bonito para ver, pero muy duro para jugar».