El fortín de Ipurua. Un tópico con fundamentos históricos, que el Eibar parece dispuesto a reforzar esta temporada.

Curiosamente, con un entrenador al frente que insiste cada semana en colocar en un segundo plano a rivales y escenarios. A José Luis Mendilibar le interesa su equipo. Y un estilo de juego que quiere desplegar siempre, independientemente de las circunstancias externas. «No cambiamos la idea de fútbol por un campo u otro, un rival y otro, yo hablo bastante más de nosotros que del rival en la charlas, porque quiero que los jugadores hagan lo que hacemos semana tras semana», aseguraba el míster la víspera del pasado derbi.

Pero el infierno está lleno de buenas intenciones. Se vio en San Mamés y se viene viendo a lo largo de toda la temporada. Las estadísticas no siempre reflejan fielmente la realidad –en Riazor y Gran Canaria, por ejemplo, el Eibar cayó con sendos penaltis dudosísimos en el último suspiro–, pero son las que cuentan para establecer la clasificación. Y en el caso del Eibar son evidentes: los azulgranas han conseguido el 75% de sus puntos, 16 de 21, en Ipurua. Un campo donde, curiosamente, solo Osasuna ha sido capaz de derrotar al anfitrión, en la que ha sido la única victoria de la temporada para los rojillos. El resto, 5 victorias y 1 empate –ante el Sevilla y con nueve futbolistas–.

No es sorprendente que un equipo marque mejores registros como local, aunque no es habitual que la diferencia sea tanta. El propio Eibar ha incrementado el porcentaje respecto a sus dos temporadas anteriores en la categoría –67% de sus puntos en Ipurua el curso pasado y solo el 51% un alo antes– y son muy pocos los que le superan ahora. En Primera solo hay dos equipos que lo han hecho mejor en sus estadios –el Sevilla con 18 puntos y el Real Madrid con 17– y también son solo dos los equipos para los que el factor campo resulta más decisivo que para los armeros: el Sporting, que ha conseguido el 83% de sus puntos en el Molinón, y el Málaga, que ha logrado el 80% de los suyos; dos equipos que, junto a Deportivo y Granada, son los únicos que todavía no conocen la victoria lejos de sus estadios.

En el lado contrario se sitúan Osasuna –el 72% de sus siete puntos han llegado lejos del Sadar–, Leganés, Espanyol, Valencia... y Alavés. Precisamente el próximo visitante de Ipurua, mejor hasta ahora lejos de su estadio, que pondrá a prueba el «fortín» de los armeros.