Egipto iba a someter ayer a votación en el Conejo de Seguridad de la ONU una resolución que exige a Israel el cese de su política de colonización en los territorios ocupados de Palestina, incluido Jerusalén Este, y en la que se insiste en que la solución al conflicto de Oriente Próximo para por la creación de un Estado palestino. Pero a última hora decidió posponer la sesión para continuar las conversaciones.

El texto dice que las colonias «constituyen una flagrante violación de la ley internacional y un gran obstáculo para conseguir una solución de dos Estados, así como una paz justa, duradera y completa».

EEUU siempre ha protegido a Israel y vetado condenas en el Consejo de Seguridad, aunque fuentes diplomáticas señalaron que el proyecto de resolución egipcio sería aceptable para EEUU, que podría abstenerse.

Ante esa situación Trump, alineado con las posturas de la derecha israelí, no dudó ayer en dar un paso al frente y exigir a Obama que vete el texto, abogando por negociaciones directas entre israelíes y palestinos para poner fin al conflicto.

Para Israel, la resolución supondría un duro golpe, por lo que ha tratado su posible aprobación como toda una crisis. Benjamín Netanyahu pidió públicamente a EEUU vetar el texto y el embajador ante la ONU, Danny Danon, aseguró que se estaban desarrollando «esfuerzos diplomáticos» para asegurar que no sea aprobado.