Google es consciente del gran auge adquirido por las series de última generación y si bien está llevando a cabo durante las últimas semanas una intensa campaña de autobombo a través de la cual ensalza las virtudes de sus productos, ese intento por seguir sumando fieles pasa por ejecutar un nuevo y ambicioso plan. Fruto de estas maniobras ha sido, por ejemplo, el anuncio que realizó el pasado lunes en torno a los 1.000 millones de horas de contenidos de YouTube que son visionados al mes en todo el mundo, una cifra histórica que subraya su gobierno dentro de los parámetros del consumo de contenidos online y, de paso, ha puesto de manifiesto lo difícil que supone mantener ese liderato debido a dos grandes problemas. Por un lado, ha topado con la necesidad de sacar un mayor rédito a unos contenidos cuya realización requieren  de una gran inversión que no está siendo paliada por el dinero que recauda de la publicidad y, por otro, el tema señalado al comienzo, a pesar de gran cantidad de vídeos y youtubers que se citan en la plataforma, jamás logra rivalizar con las cadenas clásicas y las plataformas de streaming.

Hace varios meses, YouTube anunció la puesta en marcha de YouTube Red, un servicio de suscripción de pago que por 10 dólares al mes ofrece todos los vídeos de la plataforma sin publicidad además de un número de series originales, la mayoría producidas por sus youtubers más seguidos. En la actualidad, este proyecto tan solo se está llevando a cabo en Estados Unidos, Australia, Nueva Zelanda, México y Corea del Sur y su acogida, lejos de ser exitosa, está siendo muy pobre.

Para variar el rumbo, YouTube ha dado un paso más en su estrategia por conquistar el mercado de la TV con la presentación de YouTube TV, un servicio con el que compite directamente con proveedores de servicio de cable y a través del cual ofrecerá los contenidos de 35 canales de network y cable en directo, además de un servicio de grabación ilimitado en la nube. Este servicio pretende competir con plataformas como Comcast o Verizon, que ya ofrecen todos estos canales en pack con sus servicios de conexión a internet. Por ahora, la plataforma no parece dispuesta a competir con Netflix a la hora de realizar considerables inversiones en contenido propio.