Pablo CABEZA
BILBO

SES presenta «Opoñerse á extinción», álbum entre la tradición local y el blues

Desde A Coruña llega SES, María Xosé Silvar, quien presenta hoy en Pagoa Kafe Antzokia de Oiartzun su álbum «Opoñerse á extinción», donde mezcla blues ardiente con música tradicional o tex-mex.

SES inicia “Opoñerse á extinción” con “Torre de Almasí”, un atractivo blues campero. Más adelante ataca un blues sucio, arrastrado y rockero, “Se a alma non me doe”, donde SES emerge portentosa a la voz, y al estilo de nuestros Eskean Kristo. Latina es “Desde o altar” o “Polo teu corazón”. En onda Burning suena “A sodomita”. Vuela acústica y folk en “Romance da bela rosa” y tradicional en la hermosa “Bótanlle leña”. Cierra disco con una norteña de aire tex-mex titulada “Semente de vencer”.

World music y algo más es lo que propone SES en su cuarto álbum, donde la artista galega se muestra capaz de caminar por diferentes paisajes y estaciones. «La lógica es la de la consecuencia natural del consumo variado. Somos lo que comemos y musicalmente yo he comido mucho, heterogéneo y creo que bueno. Después de metabolizarlo, lo expulsas, y lo que expulsas, si es sincero, tiene que contener restos de lo ingerido. Yo me crié con mi abuelo, de él me llevé lo clásico, lo lírico y mucho hispanoamericano; de mi padre el r’n’r y el blues, de mi país nuestra espectacular música y de mí todo lo que he buscado y sigo buscando, pues no hay semana que no descubra cosas nuevas. Como consumidora de música soy constante y obsesiva, no entiendo a las autoras y autores que dicen que les apasiona la música, pero que solo escuchan la suya para no contaminarse, es masturbatorio y narcisista, pero sobre todo debe ser la hostia de aburrido», mantiene María Xosé.

SES deja claro que su mundo es de colores y que encerrarse en un estilo es ver la música en cine exin. No obstante, si es capaz de tratar el blues como en “E a alma non me doe", bien parece que tiene una autopista esperándola para recorrer los numerosos festivales que hay en toda la península o incluso la ruta europea. «El blues me apasiona, pero yo no soy Bessie Smith ni Odetta. Soy una enamorada de ellas y de muchas otras y otros, pero yo soy cantareira, soy galega y, en cierto modo, nieta de negros, pues mis abuelos conocieron una esclavitud absoluta, sin látigo, pero con amos. Puedo sentir el blues porque conozco y siento los cantos de trabajo de mi tierra, esos con los que crecí y que portan la misma melancolía que los de Misisipi. Mi tierra tiene blues y la vuestra también. Ha tenido sangre de trabajo esclavo y de violencia, y eso está en su música, pesa en ella, y ese peso lo siento yo en mi garganta cuando canto las canciones de un país que ha sido siempre un país de negros blancos. Pero yo no soy estadounidense, soy galega», explica SES.

María Xosé es filóloga y antropóloga social, pero la música... «Crecí dentro de mi tradición musical, además de aprenderla, la viví, igual que puede vivirla una niña que se cría desde los cinco años en el flamenco. Bien, pues yo me crié en mi tradición musical, que no tiene tanta prensa, pero que es igualmente maravillosa. Además mi casa era un hogar de grandes consumidores musicales. A dedicarme profesionalmente a ella me llevó la casualidad, nunca había querido ser cantante, yo no escogí la música, ella me escogió a mi, y estoy contenta. El mundo de la música tiene sus cosas, hay mucho imbécil y mucho machismo, pero como en todo oficio, quejarse sería soberbio», afirma rotunda.

SES actúa hoy en Pagoa Kafe Antzokia de Oiartzun a partir de las 22.30. Moonshakers es la banda invitada, cinco chicas de Getxo con el rock por seña y con varios años de pelea.