Ahí está, uno de los mejores debuts en lo que va de año. No solo dentro del cine español, sino directamente dentro de toda la temporada festivalera. Desde Málaga y el D’A de Barcelona, nos llega la ópera prima de Elena Martín, quien saltara a la fama (dentro de círculos cinéfilos muy sibaritas) por ser la protagonista de la también sorprendente “Les amigues de l’Àgata”, obra a ocho manos firmada por Laia Alabart, Alba Cros, Laura Rius y Marta Verheyen. Pues bien, en esta ocasión el protagonismo de dicha actriz es absoluto. Ella sigue siendo la cara visible de esta nueva película... pero es que además se encarga de la dirección y de la escritura.

La historia nos presenta a Júlia, una estudiante de arquitectura de 21 años que mira entre ilusión y terror a ese rito iniciático por el que otros tantos han pasado antes: el Erasmus. A ella le ha tocado ir a Berlín, esa ciudad aparentemente tan gris y fría... pero en realidad tan llena de vida; tan joven. El escenario y la experiencia llaman al desmadre, y como no podía ser de otra manera, “Júlia ist” tiene mucho de esto, aunque a fin de cuentas, destaca mucho más por la madurez. En la puesta en escena, en la gestión de los tempos narrativos, y claro, en el retrato del siempre complicado (y por esto fascinante) proceso de hacerse adulto.