Otra jornada más con el Ibex en negativo. Las dudas sobre la expansión de la epidemia del coronavirus, con casos repartidos ya por todo el mundo, y las caídas de los bancos, golpeados por los débiles resultados de algunos de ellos en el ejercicio pasado, le han llevado a perder en enero un 1,90%. En la sesión de ayer, el Ibex se dejaba un 1,16%, hasta los 9.367,90 puntos. En la semana recorta un 2,03%.

El pesimismo de los mercados, a uno y otro lado del Atlántico, crecía aún más después de conocerse la declaración de emergencia sanitaria internacional por parte de la OMS, que trata de frenar la proliferación de casos fuera de China. En Europa se impusieron de forma generalizada los descuentos: Fráncfort cedía un 1,33%; París, un 1,11%; y Londres, un 1,30%. En Nueva York, media hora después del cierre en las bolsas europeas, los índices principales cedían entre el 1% y el 1,3%.

Por otro lado, los inversores pasaron por alto la incertidumbre que supondrán las negociaciones para establecer las nuevas relaciones entre Gran Bretaña y la UE después de la ejecución oficial del Brexit en la medianoche de ayer.

Por valores del Ibex, llamó la atención el hundimiento de Sabadell (-13,94%) pese a presentar un beneficio de 768 millones de euros en 2019, un 134% más. El castigo vino por las pérdidas del último trimestre y las decepcionantes previsiones para 2020. También cayó BBVA (-0,85%), que sufrió el año pasado un recorte en su beneficio del 35%, hasta los 3.512 millones de euros, pero mantiene el dividendo. Todo el sector bancario, excepto Caixabank (+0,15%), cerró en rojo. Santander bajó un 3,07%; Bankia, un 2,18%; y Bankinter, un 1,48%. Cellnex (+2,53%) y Siemens Gamesa (+0,91%) encabezaron las subidas.