El Ibex volvía ayer a cerrar en positivo, tras la pequeña caída del martes, y se ha puesto en camino de los 10.100 puntos. Sigue la marcha alcista de febrero a pesar de algunas puntuales correcciones relacionadas con noticias alarmantes sobre el coronavirus. Los avisos de las compañías sobre sus efectos en los beneficios de estos meses inquietan a los inversores, pero el freno paulatino en los contagios y los estímulos de Pekín para moderar su impacto en el crecimiento invitan a pensar en una crisis de corta duración. Ahora bien, los expertos están a la espera de conocer el alcance del recorte del PIB en la proyección oficial del Gobierno chino. No se debe olvidar que en 2019 crecía un 6,1%, su ritmo más bajo en 29 años, y parece difícil que pueda mantenerse a ese nivel por el golpe de la enfermedad en su economía.

El Ibex fijó su último cambio en los 10.083,60 puntos, después de sumar un 0,78% y haber rebasado los 10.100 puntos durante la sesión. Las ganancias se extendieron por Londres (+1,02%), París (+0,90%) y Fráncfort (+0,79%). En Nueva York, la duda creada por Apple con el efecto del coronavirus en sus cuentas, quedó ayer en nada. El gigante tecnológico se movía al alza a la hora del cierre en Europa tras ceder un 1,83% el martes. Además, los índices S&P 500 y el Nasdaq Composite marcaban nuevos máximos históricos, mientras el Dow Jones lograba superar los 29.400 puntos.

Los mejores valores del Ibex fueron Siemens Gamesa (+3,44%), Acciona (+3,06%) y Cellnex (+2,09%). En el apartado de caídas, despuntó ACS (con un -4,37%), castigado después de presentar sus resultados. La constructora ganó 962 millones de euros en 2019, un 5% más. Inditex (+1,20%) e Iberdrola (+0,94%) encabezaron a los grandes valores.