El vicelehendakari navarro José Maria Aierdi anunció ayer en el Parlamento que las viviendas de protección oficial (VPO) no caducarán a los veinte años, tal y como sucede ahora. De este modo, se cierra la puerta a que fondos buitre como Testa adquieran estas viviendas.

Este fondo buitre se hizo con 390 viviendas a las que se les había caducado la protección y amenazaba a sus inquilinos, muchos de ellos familias vulnerables, con un incremento notable de sus alquileres para poder permanecer en sus viviendas.

Tras la denuncia y las protestas de estos inquilinos, en febrero, Aierdi anunciaba que se había alcanzado un acuerdo con Testa por el que se establecía un tope máximo de alquiler con un coste anual de 100.000 euros para las arcas públicas.

Sin embargo, no dejaba de ser una actuación puntual que no resolvía un problema derivado del sistema de protección pública de vivienda establecido por el Gobierno navarro hace décadas, en el que la protección de las viviendas caducaba a los veinte años. La irrupción de los llamados fondos buitre complica la situación.

Según los datos facilitados por Aierdi ayer en el Parlamento, son 800 las viviendas cuya protección ha caducado o lo hará en los próximos años. «No es algo repentino. Es la secuencia que ya estaba diseñada hace 20 años», destacó.

De momento, el Gobierno navarro solo tiene un borrador de la nueva ley, pero el objetivo es que la protección de la vivienda se convierta en permanente en las nuevas promociones. Mientras, se aplicarán medidas para proteger a los inquilinos vulnerables.

Junto a ello, según avanzó Aierdi, se aboga por introducir más cambios en el modelo, por lo que el Gobierno será quien ejerza directamente las promociones a partir de ahora, dejando de derivar el alquiler protegido a promotores privados.

Todos los grupos parlamentarios menos Navarra Suma valoraron positivamente el nuevo modelo anunciado por Aierdi. Así, Jorge Esparza, parlamentario de Navarra Suma, criticó la medida señalando que «tenemos café para todos, han equiparado a todos por igual y no están destinando los recursos públicos ni a las personas que más están sufriendo la crisis del covid ni a las personas que estaban en peores situaciones antes del covid».

Desde EH Bildu, Maiorga Ramírez recordó que lo que ahora se padece son las consecuencias del «modelo de UPN» y defendió que se dé salida a la vivienda vacía para dar solución a la problemática del alquiler e impedir negocios especulativos.

Arantza Biurrun (PSN) apoyó las medidas que permiten a las familias vulnerables seguir residiendo en sus viviendas, mientras que Ana Ansa (Geroa Bai) también puso el foco en las políticas llevadas a cabo en legislaturas anteriores y defendió la necesidad de sentar las bases de una política pública de vivienda. Mikel Buil (Podemos) destacó que el anuncio de Aierdi «clarifica el horizonte» ante los fondos buitre.