El pasado sábado la Real anunció la salida inmediata del club de Ana Tejada rumbo a Estados Unidos. La noticia causó una gran sorpresa, por la propia operación -la de mayor calado del club y también de una futbolista española en términos económicos- y por el momento en el que se produce, con todavía mes y medio de competición por delante y la final de Copa a la vuelta de la esquina, pero forma parte de la nueva realidad del fútbol.

«No es que este tipo de movimientos puedan darse otra vez, es que se van a dar». Excoordinador de la sección femenina del Eibar, Ion Zabaleta trabaja en la agencia de representación Emart&Soccer desde hace tres años. Tiene claro que la salida de Tejada, Kundananji o Mayra de la Liga F no han sido puntuales. «En otras Ligas se está haciendo una apuesta mucho más fuerte. En el corto plazo es difícil pelear contra eso pero los clubes deberán buscar soluciones para hacer más atractivo su producto y poder generar así más ingresos, y también para las jugadoras, que las mejores quieran quedarse, porque tienen buenas condiciones y porque el nivel de la competición sigue siendo alto».

Eso lo saben en la Liga F, donde trabajan para que su torneo se sitúe entre los mejores. «Pero las cosas no pueden cambiarse de la noche a la mañana -recuerdan a GARA desde desde la entidad-. A veces parece que se nos olvida de dónde venimos, dónde estábamos ayer mismo. Ha pasado solo año y medio desde que la Liga echó a andar, no ha sido un camino fácil pero vamos cumpliendo objetivos». Recuedan fuentes de la Liga que «se ha pasado de no cobrar nada y de que apenas se pudiesen ver partidos a que se retransmitan todos en directo y eso, además, suponga unos ingresos de 35 millones. Eso nos pone en el camino de nuestro primer gran objetivo, que la Liga sea sostenible».

El problema es que eso no alcanza para competir con los dos grandes monstruos del fútbol mundial, Inglaterra y Estados Unidos. La competencia también llega de Arabia Saudí y de México, donde ahora mismo juegan entre otras Jenni Hermoso y la exfutbolista del Eibar Thembi Kgatlana, por la que Tigres pagó 300.000 dólares a Racing Louisville. Las dos últimas no parecen una amenaza especialmente preocupante a día de hoy, bien porque ni el torneo ni el país son en absoluto atractivos como en el caso de la WPL saudí, bien porque la posibilidad de ofrecer buenos contratos se limita a un número limitado de equipos, como es el caso de la MX Femenil. Experiencias como la de fútbol chino, donde los talonarios también se utilizaron con alegría antesdeayer sin demasiado éxito, invitan a templar las expectativas.

DINERO Y PROYECTO

Pero la WSL y la NWSL son otra cosa. También por el apoyo que reciben de las Federaciones, recuerdan desde la Liga F. «En Inglaterra, pone diez millones y en Estados Unidos, paga el sueldo de las internacionales. Nosotras, sin embargo, tenemos que dar a la Federación un buen pellizco de nuestros ingresos», lamentan. No es la única diferencia. En el caso del fútbol inglés, a la ejemplar estrategia colaborativa que desarrollaron la Federación y los clubes bajo la guía de Sue Campbell se le unen la cultura futbolística del país y el poderío económico y mediático de la Premier League. Los campos se llenan, los patrocinios se multiplican, los ingresos por derechos televisivos también y la rueda se pone en marcha. Se puede pujar por las mejores jugadoras, que a su vez hacen más atractiva la competición.

En Estados Unidos, la cosa viene de lejos pero se ha acelerado en los últimos meses. Por las fortísimas inversiones económicas -120 millones de euros ha costado el CPKC Stadium del KC Current, por 54 se ha vendido el OL Reign...- y por los cambios en la normativa. La Liga ha ido implementando medidas con el objetivo de retener a sus talentos, que durante muchos años «hicieron las Europas» en busca de Ligas más competitivas, y de atraer a los foráneos. Se ha renovado el convenio, que incluye numerosos beneficios y el aumento en casi un 50% del sueldo mínimo. También ha crecido considerablemente el límite salarial y además hay dinero, así que las Ligas del viejo continente tiemblan, aunque las cuentas de sus clubes lo agradecen cuando hay traspaso de por medio.

Lo cierto es que en este 2024 se han batido todo tipo de récords. En el mercado invernal -aunque la NWSL ha mantenido el suyo abierto hasta el pasado fin de semana-, el gasto mundial en fichakes ascendió a 2,1 millones de dólares, un 150% más que el año anterior en las mismas fechas. Posteriormente llegaron los de Kundananji, Banda o la misma Tejada, que equivalen prácticamente a la misma cantidad. Y las tres comparten destino. No es casualidad quesiete de los diez fichajes más caros de la historia los hayan realizado equipos ingleses y estadounidenses y que todos menos uno correspondan a la presente temporada.

Los otros tres corresponden a Olympique, Bayern y Barcelona. No cree Ion Zabaleta que esos grandes equipos vayan a tener demasiados problemas para retener y seguir fichando jugadoras porque ofrecen grandes proyectos, buenos sueldos y su propio nombre. Sus perseguidores lo van a tener más complicado «porque esas ofertas sí se van a igualar y a mejorar, en algunos casos muchísimo». Incluso desde la nueva Liga profesional estadounidense, que en principio estará un peldaño por debajo de la NWSL pero que «económicamente va a ser muy potente. Los clubes de esa especie de “Segunda” serían tranquilamente top3 en la Liga F, solo por debajo de Barcelona y Real Madrid. El resto ahora mismo no podría competir».

El peligro, similar a la que ha condenado a las Ligas nórdicas a un papel secundario con el paso de los años, se extiende a todas las Ligas continentales pero puede ser mayor para la española. No ayudan las famosas “Listas de compensación”, que ofrecen a las jugadoras jóvenes un doble motivo para emigrar, pero sobre todo es «porque hay muy buen nivel, hay jugadoras muy buenas -considera Zabaleta-. Además el Mundial pone el foco aún más en el fútbol español, el papel del Barcelona en Europa, se ven los resultados de las categorías inferiores... De hecho, los entrenadores españoles también tienen muy buen cartel».

Es precisamente con ese mensaje con el que se quedan en la Liga. «Se exporta talento precisamente porque esta Liga tiene mucho nivel. Que los traspasos más caros haya salido de los clubes españoles no es casualidad. Y es dinero que ingresan y que tienen para seguir invirtiendo -recuerdan desde la patronal-. A la Liga F también han venido Linda Caicedo o Keyra Walsh. Esto pasa también en el fútbol masculino. Se marcharon Messi y Cristiano Ronaldo pero llega Bellingham».

El problema, en ambos casos, es que las grandes operaciones son de salida para Real, Madrid o Levante y de llegada solo para Barcelona y Real Madrid. Las consecuencias habrá que verlas.