Alberto CASTRO
AL CIERRE

Sigue la batalla

El Ibex no pudo asediar la muralla de los 11.200 puntos, aunque tampoco se replegó lejos de la posición. Los expertos creen que en las próximas jornadas se verán nuevos ataques a ese nivel, impulsados por el inicio de la compra de deuda masiva por parte del Banco Central Europeo y las pocas expectativas de rentabilidad fuera de las bolsas. El Ibex acabó en los 11.091,90 puntos, después de dejarse un 0,29%. En la semana retrocede un 0,77%, mientras que suma en lo que va de ejercicio un 7,90%. En el resto de plazas la cara era otra, ya que Fráncfort (+0,41%) prosigue con su racha de máximos históricos y París (+0,02%) terminó al alza. Londres, por su lado, bajaba un 0,71%. En Europa, la preocupación sobre la situación de Grecia no cesa. Así, los inversores están atentos a sus problemas para hacer frente a los pagos del mes, en tanto que el Eurogrupo y el BCE siguen tirando de la cuerda para doblegar la resistencia de Atenas. En Estados Unidos, mandaban las ventas, pese a los buenos datos de empleo de febrero. Se crearon 295.000 nuevos puestos de trabajo y se redujo al 5,5% la tasa de paro, su nivel más bajo desde mayo de 2008. Los inversores lo interpretaron como una señal sólida para el adelanto a junio de la subida de los tipos de interés. En el Ibex, el más fuerte de la jornada era Caixabank (+4,22%), frente a Red Eléctrica (-2,75%), el peor del día. Entre los grandes, solo BBVA (+0,65%) e Inditex (+0,66%) ganaron terreno. En París, Carrefour (+2,27%) registró el mayor avance, mientras que Unibail (-2,35%) encabezó los recortes.