
El Parlament acoge esta mañana la segunda sesión de investidura, en la que la secretaria general del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, ha sido la primera en intervenir, después de que ayer lo hiciesen el candidato a president, Artur Mas, Oriol Junqueras de ERC y Pere Navarro del PSC.
Sánchez-Camacho ha centrado su discurso en la oposición absoluta al acuerdo entre CiU y ERC, del que ha criticado tanto la consulta de autodeterminación como las medidas económicas. La líder del PP catalán ha anunciado su esperada negativa en la votación de investidura de Mas y le ha señalado que «todavía tiene la oportunidad de no cerrar puertas y de rectificar».
Camacho, que ha querido presentarse como jefa de la oposición –pese a ser cuarta fuerza–, ha tirado de manual para cargar contra convergentes y republicanos, y no ha dudado en bautizar la próxima legislatura como la «de la frustración».
Con el artículo 2 de la Constitución española en la mano, Sánchez-Camacho ha apelado a la «unidad» y «indisolubilidad de España» para cargar contra la propuesta de consulta, contra la que también ha esgrimido el fantasma de la salida de Europa.
En el turno de réplica, el candidato a la presidencia, Artur Mas, se ha mostrado especialmente duro con el discusrso del PP y se ha preguntado: «¿Quiénes son ustedes para negar la voluntad mayoritaria del pueblo de Catalunya?».

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