El primer ministro británico, David Cameron, ha asegurado que «nada en el Islám justifica» la muerte de un militar ayer en Londres, cometido supuestamente por dos musulmanes, y ha destacado que solo fue responsabilidad de sus autores.

En una declaración ante su residencia oficial de Downing Street, Cameron ha asegurado que Gran Bretaña mostrará «resolución contra el terrorismo y el extremismo», al tiempo que ha apuntado que todas las comunidades del país «comparten» esa misma visión.

«Quienes cometieron esto intentaron dividirnos. Pero deben saber que algo así solo nos unirá y nos hará más fuertes», ha indicado.

Cameron ha subrayado que el ataque, que ha calificado de «profundamente perturbador» y «enfermizo», fue «sola y puramente» responsabilidad de los autores, en un claro intento de salvaguardar a la comunidad musulmana de posibles represalias.

«No hay nada en el Islám» que justifique ese crimen, ha dicho el líder conservador, quien ha recordado que la comunidad musulmana británica lo ha denunciado en bloque.

Dos hombres que, según los medios británicos, serían británicos de origen nigeriano han sido detenidos por la muerte del militar y permanecen bajo vigilancia policial en los hospitales donde fueron ingresados tras resultar heridos por disparos de la Policía.

Dos detenidos más

Scotland Yard ha detenido a dos personas más a los que relaciona con la muerte del soldado. Los arrestados son un hombre y una mujer de 29 años de edad y, según ha informado el cuerpo policial, están siendo interrogados en una comisaría en la capital británica.

Registros

La Policía ha registrado un domicilio en el condado de Lincoln, en relación con el suceso, así como otra propiedad en un edificio de viviendas de protección oficial en el barrio londinense de Greenwich, cercano al lugar de los hechos.

Ataques contra la comunidad musulmana

El colectivo musulmán ha denunciado con firmeza la muerte del militar, que ha calificado por el Consejo Musulmán de Gran Bretaña como «un acto bárbaro, sin ninguna base en el Islam».

Sin embargo, la comunidad musulmana ha sido objeto de diversos ataques en las últimas horas.

Dos personas fueron detenidas anoche por intentar atacar dos mezquitas, mientras que el grupo de extrema derecha English Defense League (EDL) protagonizó altercados al manifestarse contra el Islam en Woolwich.