La recepción ha tenido lugar este jueves por la mañana en el Palacio foral de la capital guipuzcoana, con el objetivo de conocer la situación de las familias de los presos, después de que hayan abandonado su huelga de hambre «por motivos de salud», según ha explicado Etxerat.

El mandatario guipuzcoano ha explicado que el objetivo de recibir a los familiares de estos presos era recabar «información de primera mano sobre la inquietante situación» que atraviesan en esta prisión.

Ha asegurado que, una vez hecho público que han dejado la huelga de hambre, se trata de «tomar el testigo y hacer un llamamiento al resto de instituciones y ciudadanía para mover al Gobierno español para que abandone una política estéril y vengativa, que no conduce a dinámicas de progreso en el proceso de normalización política en Euskal Herria».