Arantxa MANTEROLA

Presentan los nuevos cantones entre protestas de la oposición

El Consejo General de Pau ya conoce oficialmente la nueva organización de los cantones del Departamento de Pirineos Atlánticos. La presentó el prefecto en la sesión de ayer donde hubo un encendido debate. Los centristas de la UMP denunciaron que la nueva distribución «favorece electoralmente» al PS. La última decisión queda en manos del Consejo de Estado

Antes del inicio de la sesión, a primera hora de la tarde de ayer, el ambiente estaba caldeado. Un centenar de personas, entre ellas muchos concejales y alcaldes, secundaron el llamamiento de Forces64 y se concentraron ante el Parlamento de Navarra, sede del Consejo General de Pirineos Atlánticos, en señal de protesta por la forma en la que se van a reorganizar los cantones, ya que consideran que perjudican a las zonas rurales, que en muchos casos no tienen en cuenta ni las realidades geográfico-históricas de buena parte de las comarcas ni en qué mancomunidades están insertados los municipios.

Fue el propio prefecto, Pierre-André Durand, quien presentó la propuesta a los consejeros generales y recordó que los objetivos de la reforma han sido la «igualdad, la paridad y la cercanía». En base a la ley de julio de 2011 que definió el número de consejeros territoriales para cada departamento y región, las circunscripciones cantonales han sido modificadas, sobre todo, siguiendo criterios de equilibrio demográfico.

Así en lugar de los 52 cantones actuales (de los cuales 21 eran cantones vascos), en adelante habrá 27 cantones (12 vascos). Cada uno de ellos contará con una media de entre 12.000 y 18.000 habitantes.

Denominación

Los cantones rurales llevarán, en principio, el nombre de la localidad más poblada de su territorio, mientras que la denominación de los cantones urbanos se fijará por la ciudad de referencia y un número adjunto al nombre (por ejemplo, en la zona de Baiona habrá tres cantones, Baiona I, II y III). El prefecto dejó entreabierta la posibilidad de cambiar la denominación de los cantones.

Aunque en el futuro en el Departamento habrá menos cantones, el número de consejeros aumentará. Hasta ahora había un único consejero por cantón, es decir, 52 (de los cuales 21 vascos) pero a partir de las elecciones de 2015, fecha de los próximos comicios, serán dos consejeros por cantón, con lo que habrá 54, dos más que en la actualidad. El escrutinio binominal obligará a respetar la paridad hombre-mujer, es decir, en cada cantón se presentarán candidaturas en tándem de hombre-mujer con sus respectivos suplentes. La pareja ganadora será quien represente al cantón en el Consejo General. De esta forma, la paridad estará garantizada.

Paridad

Ese fue, de hecho, prácticamente el único punto que concitó el consenso de los consejeros de diferente tendencia en el debate de ayer que creó mucha expectación, ya que pocas veces la sala de plenos del Consejo de Pau ha estado tan llena.

El centrista Jean-Jacques Lasserre, jefe de fila de Forces64, deploraba la nueva división en la que hubiera deseado que los cantones del interior se hubieran reagrupado de otra forma. Mencionaba los de Bidaxune- Hazparne-Bastida, el de Nafarroa Beherea y el de Zuberoa como cantones, algo bastante lejos del planteamiento oficial.

Max Brisson, que hace unos días denunciaba en nombre de la UMP que el nuevo mapa estaba diseñado en base a «intereses electoralistas favorables al PS», arrancaba los aplausos de la oposición al afirmar que recurrirá la nueva distribución.

Por su parte, el consejero general abertzale, Alain Iriart, también criticó que la reorganización se haya realizado «sin consenso». Mencionó las primeras intenciones de desfigurar el territorio vasco con la creación de un cantón vasco-bearnés.

El consejero de Hiriburu añadió que, gracias a la movilización de electos, a los posicionamientos del Biltzar de Alcaldes o a la manifestación de Batera en Maule, «hemos conseguido corregirlo» y que se mantenga diferenciada la «realidad vasca y la bearnesa», algo de lo que dijo «alegrarse» a falta de «una Colectividad Territorial específica que, de una manera u otra, verá la luz un día». Criticó que no se haya contemplado la concordancia con las intercomunalidades y mancomunidades.