La OTAN ha mostrado su satisfacción porque la Unión Europea planifique una misión para atajar el problema de las migraciones en el Mediterráneo con el amparo de la ONU, pero ha subrayado que se trata de un asunto «estrictamente» de la UE y «relativo al control de fronteras».

El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, en una rueda de prensa al término de dos días de reunión de los ministros aliados de Exteriores en Antalya, al sur de Turquía, ha mostrado su satisfacción: «El alto número de refugiados, de víctimas que pierden su vida al intentar cruzar el Mediterráneo es un gran desafío», ha reconocido.

La jefa de la diplomacia de la UE, Federica Mogherini, por su parte, ha explicado a los ministros sus gestiones en la ONU para que el Consejo de Seguridad impulse un mandato que ampare la misión que la UE proyecta en el Mediterráneo.

«Intercambiamos información y asistencia. Pero es una operación de la UE, que se centra sobre todo en migración y control de fronteras, de manera que es comunitaria», ha recalcado Stoltenberg.

Preguntado por la opción de destruir barcos que podrían servir para trasladar a refugiados y migrantes a Europa, Stoltenberg se ha negado a entrar en detalles. «La UE está trabajando ahora con elementos diferentes. Lo correcto es esperar y ver cuál será la decisión final en la UE, y también que haya un mandato de Naciones Unidas para partes de esa operación. No comentaré elementos concretos», ha sentenciado.

Finalmente, ha negado que exista una solicitud de asistencia: «Dejemos que ellos decidan; se trata de migración. Si la UE entrega una solicitud a la OTAN, la evaluaremos, pero hasta ahora no han solicitado usar nuestros recursos en su operación», ha apuntado.