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BOGOTÁ

La Ley de Amnistía, un paso en firme hacia la paz en Colombia

La aprobación por parte del Congreso colombiano de la Ley de Amnistía e Indulto es un paso en firme en la construcción de la paz y posibilita el traslado de las FARC-EP a las Zonas Veredales Transitorias de Normalización, donde se procederá a la dejación de armas. «La implementación comienza a ser realidad», proclamó Piedad Córdoba.

«Saludamos la aprobación de la Ley de Amnistía; este es un paso más en el largo camino que tenemos que transitar los colombianos hacia la paz», valoró el comandante en jefe de las FARC, Timoleón Jiménez, en su cuenta de Twitter, en la que se presenta con nombre y apellido, Rodrigo Londoño. El miércoles, el Senado colombiano aprobó con 69 votos a favor la Ley de Amnistía e Indulto –la oposición se ausentó de las votaciones–. Previamente lo había hecho la Cámara de Representantes con 115 votos a favor y 3 en contra.

Según el Acuerdo firmado el pasado 24 de noviembre en Bogotá, «a la finalización de las hostilidades, el Estado colombiano otorgará la amnistía más amplia posible» y, a la hora de «determinar las conductas amnistiables o indultables, se aplicará el principio de favorabilidad para el destinatario, cuando no existiera en el derecho internacional una prohibición de amnistía o indulto», añade.

No serán objeto de amnistía o indulto los delitos de lesa humanidad, el genocidio, graves crímenes de guerra, la toma de rehenes u otra privación grave de la libertad, la tortura, las ejecuciones extrajudiciales, la desaparición forzada, la violación y otras formas de violencia sexual, la sustracción de menores, el desplazamiento forzado ni el reclutamiento de menores.

Se concederá la amnistía por «los delitos políticos de rebelión, sedición, asonada, conspiración». Los delitos conexos con el delito político, tales como «facilitar, apoyar, financiar u ocultar el desarrollo de la rebelión, violación ilícita de comunicaciones o correspondencia de carácter oficial, obtención de documento público falso, utilización ilegal de uniformes e insignias, fabricación, porte o tenencia de armas de fuego (...)» también serán amnistiables.

Los agentes del Estado recibirán «un tratamiento penal especial diferenciado, equitativo, equilibrado y simultáneo».

Todo «tratamiento especial» estará sujeto al «deber de contribuir individual o colectivamente al esclarecimiento de la verdad o del cumplimiento de las obligaciones de reparación que sean impuestas por la Jurisdicción Especial para la Paz. Si durante los cinco años siguientes a la concesión de la amnistía, indulto o de cualquier otro tratamiento especial, rehusaran de manera reiterada e injustificada a cumplir tales requerimientos, perderán el derecho a que se les apliquen» las sanciones previstas en la Jurisdicción Especial para la Paz.

Al igual que Timochenko, el presidente Juan Manuel Santos saludó la aprobación de la ley, «un primer paso para la consolidación de la paz».

Voces de Paz, partido creado en virtud de los Acuerdos para verificar su implementación, consideró que se ha iniciado «el proceso de construcción de una nueva Colombia».

 

Timochenko rechaza la colaboración de Colombia con la OTAN

El comandante en jefe de las FARC-EP, Rodrigo Londoño, alias Timoleón Jiménez o Timochenko, denunció que el acuerdo de cooperación con la OTAN supone «un paso atrás» para la soberanía de Colombia.

«La oligarquía aspira a convertir el fin de la confrontación armada en el escenario ideal para la entronización del neoliberalismo, mientras que las FARC aspiran a convertirse en el gran detonante de la lucha contra los designios del poder hegemónico», resaltó el líder guerrillero.GARA