El llamado «caso Bidegi», en el que se investigan pagos públicos por supuestos trabajos falsos en la AP1, se instruye en el Juzgado de Azpeitia en absoluto silencio. Tras el relevo en la Diputación de Gipuzkoa, la parte querellante se convirtió en la práctica en defensora de los investigados, con lo que se creó un vacío notorio en la acusación. En medio de este aparente bloqueo cobra más relevancia la citación mañana como testigo de Santiago García Salvador, que era el delegado de la constructora Dragados en el tramo Eskoriatza-Arrasate Norte de la AP1, objeto de la primera querella de las dos que interpuso la Diputación en la época de Bildu.

Como ya publicó GARA en su día, en julio de 2008 García Salvador remitió un mensaje a varios compañeros de UTE, entre los que se encuentra alguno ya imputado, que apunta al descontrol en los pagos públicos por la obra y señala directamente a los responsables políticos de Bidegi (también del PNV, como en la actualidad).

En el e-mail, García Salvador les comunica el resultado de dos reuniones: una primera con Agustín Zugasti –entonces director técnico de Bidegi y ahora imputado en las querellas– y otra posterior con Borja Jáuregui –ya fallecido, en aquel momento director general de Bidegi y que también fue alcalde de Hondarribia–. En estas entrevistas el constructor intenta lograr revisiones al alza del precio de la obra, alegando diversos problemas sobrevenidos.

Lo que llama la atención en el mensaje es que las cantidades reclamadas parecen ir definiéndose sobre la marcha. Así, García Salvador explica que hizo con Zugasti una «cuenta tonta» que «nos salió 120 millones de euros, a lo que Agustín dijo, pues sí, por ahí estaría el tema. Yo le dije que ahí no había nada de los viaductos y otras reclamaciones importantes, a lo que él me dijo que eso ya con Borja [Jáuregui]. Es decir, que el número sería mayor que ese, pero ya con los políticos y que eso ya no es cosa suya».

Reunido después con Jáuregui, el constructor cuenta que tras unas desavenencias iniciales el director general de Bidegi se ha mostrado dispuesto a «rematar» el aumento de precio.