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La oposición aplaude la marcha de Mendoza y el cuatripartito ve «aciertos y errores»

Los grupos con representación en el Parlamento han analizado de forma desigual la dimisión ayer del consejero de Educación, José Luis Mendoza, en quien sus propios compañeros reconocen «aciertos y errores» y sobre la que desde la oposición consideran «buena noticia».

El ya ex consejero Mendoza, durante su intervención en el Parlamento. (PARLAMENTO DE NAFARROA)
El ya ex consejero Mendoza, durante su intervención en el Parlamento. (PARLAMENTO DE NAFARROA)

Así lo han puesto de manifiesto los representantes de los partidos al término de la reunión de la Junta de Portavoces del Parlamento, con un Javier Esparza, UPN, que ha considerado la dimisión como la evidencia del «fracaso de la política educativa sectaria» del Gobierno.

Sin embargo, ha advertido de que Mendoza era «un peón» de la política marcada por Uxue Barkos, quien continúa en el cargo, por lo que ha advertido de que «la orientación política que se quiere hacer de algo tan importante como la educación, me da que quiere ser la misma».

El portavoz de Geroa Bai, Koldo Martínez, ha agradecido que, «con aciertos y errores», Mendoza ha aportado «mucho al cambio que Navarra necesitaba y sigue necesitando», al tiempo que ha deseado que con María Solana el departamento «continúe en la senda del cambio, profundice en las cuestiones iniciadas, y lo haga de una forma consensuada», en un cambio «más inteligente y quizá hasta más prudente».

Por EH Bildu, Adolfo Araiz, ha contextualizado la dimisión en el marco de «una campaña de erosión y desgaste realizada en los dos últimos años sobre una persona en concreto» y «sobre políticas concretas» que para su grupo tienen «luces y sombras», por lo que se ha centrado en esperar «energía suficiente» en su sustituta para llevar a cabo las «muchas cosas por hacer».

Laura Pérez, Podemos, ha reconocido los «dos años críticos e intensos», también con «errores» del consejero dimitido, como el de mantener a cargos de gobiernos anteriores, y ha deseado que la nueva consejera «actúe desde el máximo consenso en un ámbito tan delicado como el de la educación».

Por el PSN, Inma Jurío ha sido muy crítica con la «nefasta» política del «polémico» Mendoza, quien con sus decisiones «ha creado inseguridad» en profesores, centros, alumnos y padres, si bien ha alertado de que con su dimisión no cesa la política educativa dictada por la misma presidenta, y también ha aludido a las fechas prevacacionales elegidas para el anuncio, «para no dar demasiado eco» a un asunto que «no tenía otra solución».

Javier García, PPN, también la ha considerado «una muy buena noticia para la comunidad educativa, que debería haber sido ya hace muchísimo tiempo», ha dicho para considerar que esta era «la única forma de reconducir la situación», en la que «es hora de dejar de lado el sectarismo que ha caracterizado al departamento de Educación durante este tiempo».

Por I-E, José Miguel Nuin ha reconocido sus discrepancias en algunos asuntos con las decisiones de Mendoza, aunque ha valorado que se han hecho «cosas importantes», pero ha abogado por dar «un impulso mucho mayor» con la nueva consejera, con la que seguirán teniendo «la misma actitud» de «decir claramente y sin problema» tanto las cosas que a su juicio se hagan bien como las que no.