El portavoz del Govern, Jordi Turull, ha comparecido poco antes de las once de la mañana para informar de que a esa hora, y pese a la actuación de las fuerzas policiales españolas, casi tres de cada cuatro mesas electorales permanecía abierta en Catalunya.
Concretamente eran 4.561 mesas, el 73%. «El Govern pide a la gente que vaya a votar de manera cívica y pacífica», ha declarado Turull.
▶️#Portaveu @jorditurull: "defensar la democràcia sempre valdrà la pena" #1OCT pic.twitter.com/XvQ4VxgXSH
— Govern. Generalitat (@govern) 1 de octubre de 2017
El portavoz del Ejecutivo catalán ha subrayado que «defender la democracia siempre valdrá la pena», y ha reclamado la dimisión del delegado del Gobierno español, Enric Millo, por «ser responsable directo de una violencia y represión de Estado», unas actuaciones que «recuerdan a la época del franquismo».
Además, ha censurado el «vocabulario maltratador» de Millo cuando ha afirmado que el Ejecutivo de Madrid «se ha visto obligado a hacer lo que no quería hacer».
En este contexto, el conseller ha pedido a la comunidad internacional que mire «con atención» la actuación policial de hoy en Catalunya: «Este no es un problema interno de España, es un problema interno de la UE, somos ciudadanos europeos».
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