El proceso liderado por la Diputación de Bizkaia para elaborar un plan que sirva de «estímulo» a Enkarterri finalizó ayer con una reunión en la que se validó el documento que recoge las doce medidas acordadas y se establece una mesa de seguimiento que se convocará trimestralmente. El diputado general aclaró que es «un plan que ni es el principio, porque llevamos muchos años comprometidos con Enkarterri; y que tampoco es el final, puesto que el futuro requiere de actuaciones y reflexiones a más largo plazo».

Unai Rementeria consideró que las medidas son «concretas y realistas». «Me consta que ha habido muchísimas medidas y opciones. No caen en saco roto. Habrá tiempo –aseguró– para impulsar muchas de ellas, pero ahora había que elegir un puñado de ellas que fueran asumibles y que se pudieran poner en marcha de forma inmediata».

Rementeria subrayó que las medidas que se implementarán a partir del 1 de enero de 2018 supondrán una «inversión extra» de 3,6 millones de euros por parte de las arcas forales. Se persigue mejorar la competitividad de la comarca, su estructura sectorial y diversos aspectos del entorno empresarial para crear nuevos puestos de trabajo.

Entre otras medidas, se apuesta por la promoción de un programa de apoyo a la inversión empresarial aprobado por la UE; reforzar el tejido empresarial, mejorando su competitividad; la puesta en marcha de un programa de emprendimiento avanzado para facilitar nuevas iniciativas empresariales y de empleo con especial atención a jóvenes y mujeres; acciones para aprovechar los recursos forestales; medidas para mejorar la rentabilidad de las explotaciones ganaderas y la implantación de nuevos productores; y actualizar el catálogo de suelos industriales, al tiempo que se desarrollan y se llevan a cabo nuevas actuaciones en esas áreas.

Se propone abrir una oficina de atención integral de la Diputación, ajustes en las líneas de Bizkaibus existentes y tratar de mejorar las pésimas conexiones ferroviarias, con tres trenes diarios entre Karrantza y Bilbo. En este ámbito, el alcalde de Karrantza confesó que no es «muy optimista», aunque el ‘‘independiente’’ Raúl Palacio apostilló que «vamos a esperar».

«Falta de transparencia»

Los regidores del PNV cierran filas en torno al plan, no así el primer edil de Zalla, otro ‘‘independiente’’, Javier Portillo, que considera que «la música que nos presenta Orkestra bajo la batuta del diputado general desafina». El representante de Zalla Bai dijo que «es el resultado de un proceso falto de transparencia, en el que no quieren explicarnos las acciones que ha priorizado cada entidad».

No pasó por alto que Rementeria convocó en setiembre a los alcaldes de Alonsotegi, Artzentzales, Balmaseda, Galdames, Gordexola, Gueñes, Karrantza, Lanestosa, Sopuerta, Turtzioz y Zalla después de que se celebrase una gran manifestación en favor del empleo y los trabajadores de CEL se concentraban ante la Diputación exigiendo su «implicación». Ayer, una vez concluido el proceso, el primer edil de Zalla se preguntó si esta iniciativa «trataba realmente de impulsar Enkarterri o de apagar el fuego de la movilización ciudadana». «Pido justicia para la comarca, no caridad; necesitamos inversiones, no limosnas», enfatizó.

Portillo advirtió que la inversión en nuevas infraestructuras es cero, «tan solo repesca una de las actuaciones que ya prometía el Plan Territorial Parcial en 2011, el viaducto de Malabrigo –en la carretera BI-630 Balmaseda-Karrantza–, que tenía que estar terminada en 2015 y que ahora reconoce la Diputación que no estaba entre sus prioridades, y que pasa a estarlo, lo que es una buena noticia, pero no una estupenda noticia». También lamentó que no haya más dinero para Bizkaibus, a pesar de que en setiembre entregó al diputado general una propuesta para mejorar el servicio en la comarca. «No se nos ha respondido», denunció.

«No nos gusta la música de momento porque genera cero puestos de trabajo en un corto plazo y porque presenta un refrito de análisis, estudios y asistencias técnicas junto a medidas generales para toda Bizkaia y Euskadi y obras que ya estaban previstas y planificadas pero que no se habían ejecutado», expuso el alcalde del municipio más poblado de Enkarterri.

Rementeria afirma que están detrás de la solución de CEL

El diputado general de Bizkaia reivindicó ayer el protagonismo del Gobierno foral en la solución que permitirá que la actividad del grupo CEL se mantenga, algo que choca con las críticas de los representantes de los trabajadores que achacaron a la «pasividad» de la Diputación y Lakua que se hayan visto obligados a aceptar las condiciones impuestas por Lucart.

«La Diputación ha sido importante para la solución; lo digo con humildad, pero con orgullo. Nuestro compromiso con Enkarterri también es dar la cara en los momentos malos, con un trabajo callado y constante hasta encontrar la solución. Para mí esta es la verdadera responsabilidad e implicación, muy por encima de gritos, camisetas o pancartas», defendió Unai Rementeria. «Quizás la primera gran medida de este plan de estímulo sea haber logrado que CEL siga abierta y viva», destacó el jeltzale.

No opina lo mismo el alcalde de Zalla, quien incidió en el empleo perdido y la rebaja salarial. «Debe ser incómodo escucharnos, pero no nos van a encontrar en el conformismo y el seguidismo. Disiento con el diputado general, que ha dicho que estamos mejor que hace dos meses. Que CEL continúe la actividad es mejor a que hubiera desaparecido, pero se han destruido 80 puestos de trabajo y las responsabilidades de por qué CEL llegó a esa situación aún están sin depurar», manifestó Javier Portillo, crítico con la posición del Ejecutivo foral. A. G.