La orden es que como muy tarde el sábado día 30 se retiren los dos barcos que siguen atracados en Barcelona para alojar a parte de los agentes movilizados desde diferentes puntos de la geografía española, dando por concluida la «operación Copérnico».

El pasado 16 de diciembre partió del puerto de Barcelona el ferry Moby Dada, conocido como el barco de Piolín, y a día de hoy quedan en servicio el GNV Azzurra y el Rhapsody.

«El día 30 ya no quedarán efectivos de los desplazados con motivo de los últimos acontecimientos», han explicado las citadas fuentes, que destacan que en Catalunya permanecerán los policías y guardias civiles que forman parte de la plantilla fija en este territorio.