Tras la Cuaresma, llega la Semana Santa. La Pascua judía conmemora la huida del pueblo hebreo de su esclavitud de Egipto cruzando el Mar Rojo a pie enjuto –se celebra el primer sábado de luna llena del equinoccio de primavera–, mientras que la tradición cristiana celebra la pasión, muerte y resurrección de Jesús de Nazaret.

Dos celebraciones en parte paralelas, en parte enfrentadas por la «responsabilidad» del pueblo judío en la crucifixión –tormento especialmente cruel, porque en aquella época simbolizaba darle muerte a alguien dejado de la mano de Dios– de Jesús, menos de una semana después de su triunfal entrada en Jerusalén, aclamado como rey por sus seguidores, quienes, según las escrituras, extendiendo mantos, ramas de olivo y de palma a su paso, gritaban «¡Bendito el que viene en el nombre del Señor!».

Sirva esta didáctica y alegórica introducción de lo que esta noche, Jueves Santo, a las 21.00, vivirá el Buesa Arena. Una suerte de «Jueves de Ramos» si es que Saski Baskonia consigue encadenar su décima victoria seguida de este espectacular mes de marzo, ante un Maccabi que, por ser quien es y representar lo que representa, nunca es únicamente otro rival más. Sirva también para tomar la temperatura de lo que puede ser Zurbano esta noche, con la presencia de más de 12.000 almas que serán 12.000 gargantas a lo largo de los 40 minutos de juego.

No hace falta aclararlo porque es de sobra conocido que Saski Baskonia depende de sí mismo; incluso seguirá dependiendo de sí mismo en caso de ceder ante los de Neven Spahija, ya que la semana que viene los gasteiztarras recibirán al colista Anadolu Efes en el Buesa Arena. Pero una vez puestos en harina, la idea gasteiztarra no es solo colarse entre los ocho mejores de Europa, sino buscarse el mejor cruce posible. A día de hoy, Saski Baskonia pelea con el Maccabi por amarrar el octavo lugar, pero también con Zalgiris y Khimki para avanzar hasta la sexta plaza. Los de Pedro Martínez cuentan con un triunfo menos, pero tienen el basket average ganado, y mientras Zalgiris recibe al CSKA, Khimki tiene una dura prueba frente a Fenerbahçe. Es decir, que los gasteiztarras optan a cerrar ya esta penúltima jornada sextos, lo que dejaría un cruce del Baskonia con Olympiacos, a priori «menos imposible» que vérselas ante, precisamente, el CSKA y Fenerbahçe.

De cara al partido de esta noche, todo apunta a que Marcelinho Huertas, lesionado en el partido ante el Joventut, podrá reaparecer y tener sus minutos junto con Granger y Vildoza.

Martínez: «Hay que disfrutar, y sufrir, el momento»

«A nivel de resultados hemos conseguido nuestro objetivo, que era llegar a las dos últimas jornadas dependiendo de nosotros. Pero eso no significa que lo tengamos hecho, porque hemos de tener máximo respeto por nuestros rivales. Y más Maccabi, que durane toda la Liga Regular ha estado por delante», advertía Pedro Martínez.

«El camino no ha sido nada fácil, y ha habido malos momentos para llegar hasta aquí», abundó, al tiempo que quiso subrayar la necesidad de «disfrutar, y sufrir, el momento. Un exceso de ambición te lleva a no valorar lo que estás haciendo y a no disfrutar del momento. Ahora no tenemos que pensar en los play offs».

Neven Spahija, un viejo conocido por Zurbano, lidera a este Maccabi. El de Sibenik no ahorró piropos sobre el Baskonia. «Está al nivel del CSKA o del Fenerbahce», sentenció. A. G.