Una nueva etapa llana en el Tour que se ha decidido al esprint. Tras no estar acertado en las primeras llegadas de la carrera francesa, Dylan Groenewegen ha acertado en las últimas dos etapas y ha podido celebrar la victoria con holgura.

La etapa ha seguido el guión establecido, con dos corredores cogiendo la fuga de salida y un pelotón, por detrás, que ha ido jugando con ellos.

Pese a no ser un día de gran tensión, una carretera algo más estrecha en los últimos 15 kilómetros ha sido suficiente para provocar una caída en la que se han visto implicados, entre otros, Jakob Fuglsang, Bauke Mollema, Julian Alaphillipe y Dan Martin. Estos dos últimos han sido los más perjudicados, dejándose más de un minuto en meta. Además, al irlandés se le ha visto magullado.

En la recta final, ningún equipo ha conseguido imponer su tren y se ha visto una llegada desordenada. Sagan ha arrancado muy pronto, y pese a que parecía que sumaría una nueva victoria, el esprint se le ha hecho largo. Por detrás llegaba Greipel, que ha tenido sus más y sus menos con Gaviria (el colombiano ha llegado a soltarle un cabezazo), pero en silencio ha aparecido Groenewegen, que se ha impuesto a todos con suma autoridad. Tanto Gaviria como Greipel han sido descalificados por el incidente.

Mañana llega una de las jornadas más temidas de este Tour. Con llegada en Roubaix, los ciclistas deberán superar 15 de los tramos de adoquín de la gran clásica París-Roubaix.