Al respecto ACOM recuerda en un comunicado que el pasado mes de junio el Ayuntamiento aprobó una declaración institucional que «busca discriminar a las personas judías y supone una grave vulneración de la ley española».

De esta manera, subraya, se ha convertido a la ciudad de Iruñea en un territorio ‘Judenfrei’.

La declaración, dice, fue aprobada por EH Bildu, Geroa Bai, Aranzadi e I-E y en ella se insta a la prohibición del uso de espacios públicos del Ayuntamiento a cualquier empresa o ciudadano que tenga relación con Israel y se exige el embargo militar a Israel, «en una clara extralimitación de sus competencias».

ACOM agrega que el texto aprobado también declara a los representantes del Israel en el Estado español como personas «non gratas» y se les «deniega cualquier relación institucional con el consistorio».

Por último asevera que el Ayuntamiento dio su apoyo a una declaración institucional del Parlamento de Nafarroa «promovida por el movimiento radical BDS en noviembre de 2016, instando al boicot».

«Todas estos puntos, sin duda alguna, marginan a un grupo social por razón de nacionalidad/etnia/religión, alentando públicamente la exclusión de los ciudadanos de Israel en nuestro país, algo manifiestamente inconstitucional», asegura ACOM.

Y destaca que «para completar el atropello, también señalan y discriminan a cualquier ciudadano español que tenga vínculos con el Estado Judío lo que, por extensión, pone en la diana a los miembros de las comunidades judías españolas, vulnerando sus derechos civiles».