En el primer semestre del año, el Puerto de Bilbo ha movido 17,6 millones de toneladas, sin contar tráfico local ni avituallamiento, lo que supone un ligero retroceso, del 1%, respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, lo que se traduce en 200.000 toneladas menos.
La razón de este descenso se encuentra, principalmente, en las dos paradas técnicas de Petronor, que han supuesto en torno a 1,6 millones de toneladas menos y han lastrado el crecimiento que venía experimentando el puerto en los últimos años, según explicó ayer el presidente de la Autoridad Portuaria (APB), Ricardo Barkala, al presentar el balance ante los medios de comunicación.
La parada de la refinería se ha debido a la mejora y renovación de sus instalaciones, en las que ha invertido 101 millones de euros. Sin esta circunstancia coyuntural, el tráfico del puerto habría experimentado un crecimiento superior al 7%.
Teniendo encuentra estas circunstancias y el crecimiento económico estimado, la APB prevé finalizar el año con incrementos de tráfico en torno al 2%. Casi el 94% de los tráficos son de «import/export». La mercancía en tránsito es prácticamente inexistente y el tráfico con otros puertos del Estado español supone solo el 6%.
Cifra de negocio
Hasta junio, la cifra de negocio se sitúa en 34,9 millones de euros, frente a los 35,4 millones del mismo periodo del ejercicio anterior, lo que representa una reducción del 1,6%. Este descenso se corresponde con la estrategia de reducción de tasas a usuarios y clientes para hacer el puerto «más competitivo» conforme al Plan Estratégico 2018-2022.
Durante el conjunto de 2019, la Autoridad Portuaria invertirá 60,4 millones, con las obras del espigón central como principal proyecto. Aquí se incluye el proyecto Future Proofing Bilbao, que es la ampliación del puerto en el Abra exterior, y la estabilización de la antigua cantera de Punta Lucero. Ya se ha finalizado el relleno de la dársena de Udondo, en Erandio, por 2,7 millones; y la urbanización de Arasur, en el municipio alavés de Erriberabeitia, por 4,8 millones.
Dentro del capítulo de inversiones, se han dedicado 1,6 millones a un proyecto de eficiencia energética, financiado al 40% por la UE a través del Feder.